La recesión se agudiza y afecta a más empresas del distrito. La fábrica Akapol decidió suspender a todo su personal por 60 días. La medida impacta a 150 trabajadores que diariamente acuden a la planta en Zelaya. Esta situación se suma a la de la empresa FV, que implementó un plan de suspensiones para 800 operarios. Un caso más severo es el de Whirlpool, que recientemente despidió a 60 empleados.
Fuentes consultadas por El Diario, señalaron que «desde la empresa informan que las ventas han disminuido considerablemente desde principios de año y tienen cinco meses de stock acumulado». Por ello, «necesitan detener la producción por completo durante 60 días, desde el 1° de mayo hasta el 30 de junio».
En este contexto, en la planta solo queda el personal no sindicalizado y de despacho.
Fundada en 1960, Akapol es una empresa líder en la producción de pegamentos y adhesivos, con marcas como Voligoma, La Gotita, Poxipol, Poxilina, Poxi-Ran y Fastix. En 1972, inauguró su planta en Zelaya, un espacio de casi 18.000 m² equipado con maquinaria de última generación.
De esta manera, Akapol se suma a una larga lista de empresas que han decidido despedir o suspender a trabajadores. Se estima que desde diciembre, alrededor de 100.000 puestos en todos los sectores de la industria se han visto afectados.
En Tandil
En las últimas horas se conoció la decisión de la reconocida empresa de fundición Fungris, de suspender temporalmente a 27 trabajadores, en el marco de la crisis económica que atraviesa el sector.
Fuentes consultadas por La Voz de Tandil, aclararon que no se trata de despidos, sino de suspensiones, en la que los trabajadores permanecen cobrando el 50 % del salario y esta situación, en principio, se sostendrá por los próximos 30 días.
La medida afectó a 20 operarios metalúrgicos, más agentes de mandos intermedios, supervisión y administrativos, que serían alrededor de 7 empleados más.
Además, también se indicó que la situación en la planta se vio agravada por la rotura de un horno de fundición, sumado a la grave crisis que atraviesa el sector metalmecánico, dado que en general, las piezas que se fabrican tienen como destino empresas estatales, o empresas proveedoras del Estado Nacional, que ha recortado toda actividad en este sentido.
«Es un sector que con las actuales políticas económicas está muy afectado», advirtieron fuentes consultadas, ligadas al golpeado quehacer metalúrgico de nuestra ciudad. (InfoGEI)