El estado de salud de Eduardo Manuel Boncompain, el apreciado mozo del Bar Querede, continúa siendo motivo de preocupación tras el despiadado ataque que sufrió el pasado domingo 24 de marzo. A pesar de los esfuerzos del equipo médico, su condición no ha mostrado mejorías significativas, manteniendo en vilo a familiares y amigos a la espera de noticias alentadoras.
Según fuentes cercanas al paciente, Boncompain experimenta movimientos involuntarios en la parte izquierda de su cuerpo y no responde a órdenes, indicando un daño considerable en su cerebro. Esta información confirma la gravedad aguda de su estado, con un pronóstico incierto y un alto riesgo para su vida.
El impacto devastador del golpe recibido en la cabeza, perpetrado por desconocidos durante el incidente delictivo en su domicilio, ha sido determinante en el diagnóstico médico. En este contexto crítico, las próximas 72 horas se vuelven decisivas para el futuro de Boncompain, mientras los profesionales de la salud luchan por estabilizar su condición y ofrecer un panorama más alentador.
Mientras tanto, en paralelo a la batalla por la vida de Boncompain, la justicia se prepara para tomar medidas respecto al presunto involucramiento de una menor de 17 años en el asalto. La audiencia de prisión preventiva, programada para este miércoles, buscará esclarecer las contradicciones en la declaración de la adolescente, señalando la gravedad de los acontecimientos que estremecieron a la comunidad.
La noche del domingo 25 de marzo quedará marcada en la memoria de todos los residentes de la zona de Avenida Colón, donde la tranquilidad se vio perturbada por la violencia doméstica que afectó a Boncompain. La rápida respuesta de los vecinos y los servicios de emergencia fue crucial para brindarle la atención médica necesaria, aunque su recuperación sigue siendo una incógnita en medio de la angustia y la incertidumbre.(Pergamino Virtual)