En el caso del maíz, la recaudación extra por el aumento de los DEX sería de US$ 120 millones aproximadamente, «una cifra insignificante, si se compara con los más de US$ 6.500 millones que ya aporta el sector agropecuario», evaluó CRA en un comunicado.
Contempló además que el maíz «no sólo es muy importante en la rotación para la mejora de los suelos, sino que, a su vez, es un claro motor de muchas economías que dependen de este insumo para su funcionamiento».
Por su parte, «el girasol es una ‘economía regional’, que es única alternativa agrícola, económicamente viable, en varias zonas y que no compite con otros cultivos por producirse en tierras más ‘marginales'», por lo cual «esta situación amerita un tratamiento preferencial», puntualizó la entidad.
En este sentido, manifestó que «elevar los DEX de 7% a 15% volvería inviable el cultivo, sobre todo en un año en que hay abundancia de aceite en los mercados internacionales, los cuales han deprimido los precios, en especial el de girasol».
En tanto, continuó CRA, «el impuesto PAIS elevará los costos de los insumos en un 5%, y el aumento de los DEX a 15% hará caer un 10% los ingresos del productor», tras lo cual subrayó que «dicha combinación implica una caída de un 30%/35% de la renta esperada, haciendo que en muchos lugares dicha renta pase a ser negativa».
Libertad cuestionada
«El aumento de los DEX no aumentará la recaudación y sólo traerá un menor precio al productor en un año de altísimos costos, y una pésima señal hacia el futuro», aseveró la entidad miembro de la Mesa de Enlace Agropecuaria, y concluyó: «La libertad no puede estar atada a una mochila impositiva que nos termine ahogando».
En otro orden, CRA recordó que durante la campaña 2022/2023 «las pérdidas económicas del productor superaron los US$ 15.000 millones y a pesar de la dureza de la sequía y las consecuentes pérdidas económicas, el productor mediante los DEX tributó más de US$ 4.500 millones».
Refinanciamiento de deudas
«De cara a la campaña 2023/2024, el productor tuvo que refinanciar esas deudas y se endeudó para poder sembrar nuevamente», expresó.
Asimismo, remarcó que «producto de distintos factores a mediados del 2023, los precios de los insumos se incrementaron con aumentos en dólares del 40% y hasta el 90% entre mayo y noviembre, como el caso de la urea y fósforo, todos elementos que fueron impacto directo al bolsillo de los productores».
Mejora por tipo de cambio
Por último, la entidad indicó: «Con el nuevo tipo de cambio, el productor tuvo una mejora del 28% en los ingresos, pero sus costos en pesos pasaron de un dólar de 360 a 800 $/Tn, lo que es un aumento de más del doble».
«Si analizamos las relaciones insumo/producto vemos que el poder de compra de los granos -a pesar de la devaluación- cayó significativamente», cerró. (InfoGEI)