El municipio de Puán, ubicado en el sudoeste bonaerense, vive una situación caótica desde fines de noviembre, cuando el anterior intendente Facundo Castelli (UCR), abandonó su cargo, dejándole las cuentas en rojo, luego de aducir que tenía problemas psiquiátricos.
Su sucesor, Diego Reyes (PRO), que lo derrotó en las PASO, cuando consultó los saldos bancarios, no había un peso para pagar los sueldos de los empleados municipales correspondientes al mes de noviembre.
Según consigna el portal bahiense, CaféxMedio, el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, acudió varias veces en auxilio de Castelli para que pudiera pagar los sueldos en los meses anteriores, pero el endeudamiento llegó a tal punto que el nuevo alcalde ya no pudo pedir un giro en descubierto en el Banco Provincia.
Sin embargo, el conflicto entre los municipales y el nuevo intendente escaló desde comienzos de diciembre hasta hoy que se conoció un audio que circuló en grupos de WhatsApp donde un trabajador municipal amenaza con prender fuego la casa del intendente Reyes con “toda su familia adentro” o “manotearle la hija”.
El secretario de Gobierno, Franco Mombelli, difundió un un video en la cuenta oficial de Facebook del Municipio el audio con las amenazas y además indicó que el intendente Reyes había hecho una denuncia ante la ayudantía fiscal que funciona en Puan.
“Hay que ir a Bordenave y prenderle fuego la casa junto con la toda la familia adentro como le hicimos una vez a López”, dice la amenaza. Se refiere a Horacio López quien fue intendente durante tres mandatos, hasta 2011, y que falleció en 2021.
Como diera cuenta en su momento InfoGEI, antes de irse Castelli le giró 83 millones de pesos al Frente Vecinal que él encabezaba, con el argumento de que había sido la devolución de un préstamo para pagar sueldos. Ese extraño giro, también fue denunciado en la Justicia.
En tanto, el conflicto con los trabajadores municipales continúa dado que aún no cobraron el sueldo de diciembre, y el aguinaldo se los pagarían en tres cuotas, a lo que se suma, según denunciaron desde el gremio de municipales, que algunos trabajadores comenzaron a recibir telegramas de despido o de suspensión de contratos. (InfoGEI)