Desarrollan un nuevo enfoque para detectar el Alzheimer a bajo costo

La enfermedad de Alzheimer (EA) es una creciente causa de discapacidad y muerte a nivel mundial. Según un informe de la Organización Mundial de la Salud (OMS), se estima que, para el año 2050, afectará a más de 130 millones de personas. Y este incremento se vería reflejado también en su costo: se prevé que aumente a 1,7 billones de dólares para el 2030. Teniendo en cuenta este factor económico, muchas personas de sectores vulnerables que no tienen acceso a análisis completos de Alzheimer quedarían aún más lejos de poder recibir diagnóstico y tratamiento certero.

Ante este contexto, un equipo de investigación del Consorcio multicéntrico para expandir la investigación sobre la Demencia en América Latina (ReDLat) se preguntó si era posible desarrollar herramientas rápidas, de bajo costo y automáticas para detectar y caracterizar la enfermedad.

El interrogante impulsó un estudio en el que analizaron patrones lingüísticos en tareas breves de producción de palabras utilizadas comúnmente en las evaluaciones de detección del Alzheimer. La gran mayoría de los estudios miden el desempeño contando el número de respuestas aceptables después de eliminar las respuestas inválidas.

Sin embargo, este tipo de análisis revela déficits en casi todos los trastornos cerebrales y no puede mostrar qué tipos de palabras específicas podrían ser particularmente favorecidas por los pacientes con EA.

Nuevo enfoque

Esto motivó el nuevo enfoque desarrollado por los especialistas. “Tomamos todas las palabras producidas y las descompusimos en sus propiedades léxicas y semánticas utilizando bases de datos digitalizados que nos proporcionan valores específicos sobre la frecuencia de uso, la especificidad conceptual, la estructura de sonido, la longitud y otros aspectos de cada respuesta”, explicó Franco Ferrante, primer autor del estudio y becario del CONICET.

El estudio encontró que los pacientes con EA se caracterizan por una preferencia por palabras altamente utilizadas y, conceptualmente, poco específicas, con patrones de sonido comunes. De hecho, estas y otras propiedades de las palabras permitieron detectar a personas con Alzheimer con casi 90 por ciento de éxito.

Comparación lingüística

“Los datos se utilizaron para diferenciar entre personas con y sin enfermedad de Alzheimer y, además, se evaluó si dicha información lingüística permitía detectar qué tan afectados estaban los participantes en términos cognitivos y cerebrales”, señaló Adolfo García, otro de los autores del estudio.

Por último, los investigadores destacaron el potencial trasnacional de este método al contar que ya se está utilizando a través de TELL, una aplicación para realizar evaluaciones automáticas del habla en más de diez centros de salud de todo el mundo y en diez idiomas diferentes.

Una herramienta de calidad al alcance de toda la sociedad

Latinoamérica tiene una prevalencia alta de demencia, entre 7,1 y 11,5 por ciento entre personas mayores de 65 años, en comparación con una prevalencia más baja, estable o disminuida en Europa y Estados Unidos. Además, presenta particularidades únicas relacionadas con factores genéticos y culturales, pero también socioeconómicos. Esta última variable resulta trascendental para asegurar un acceso equitativo a la salud.

“Este es un enfoque poderoso, dado que es breve, automatizado y objetivo, por lo que podría aplicarse masivamente sin añadir carga a los pacientes y médicos. Esto es especialmente importante para las personas en condiciones desatendidas, que pueden no tener acceso a una evaluación completa para buscar posibles patologías”, destacó Joaquín Migeot, co-primer autor del estudio. (InfoGEI)