En un movimiento sorprendente, el Banco Central de Argentina ha emitido una directiva que obliga a las billeteras virtuales a distribuir las ganancias generadas por saldos en «cuentas de depósito«. Esto se aplica al dinero que los usuarios optan por no invertir en fondos comunes de inversión, llevando a las compañías financieras a compartir las ganancias en lugar de retenerlas.
La decisión, tomada recientemente por el Banco Central, abarca a las proveedoras de servicios de pago conocidas como billeteras virtuales, incluyendo nombres como Mercado Pago, Ualá, Naranja X, Personal Pay y Prex, entre otras.
La medida tiene un alcance significativo y afecta a los fondos depositados en las billeteras que, según la elección del cliente, permanecen sin invertir. Según un comunicado de la autoridad monetaria, esto permitirá que aquellos que mantienen sus fondos en cuentas de pago reciban un rendimiento que se acumulará de manera periódica.
A día de hoy, no todas las billeteras ofrecen esta opción de rentabilidad a sus clientes, ya que en algunos casos, estas ganancias quedan en manos de la empresa en lugar de ser transferidas a los usuarios. Aunque en ciertos casos los clientes pueden optar por «invertir» su dinero para comenzar a recibir rendimientos, esta nueva directriz del Banco Central se aplica también a los fondos depositados en cuentas a la vista que se utilizan habitualmente para pagos y compras.
El Banco Central no especifica plazos para el devengamiento periódico de estas ganancias, pero se espera que este cambio tenga un impacto en la transparencia y la relación entre las billeteras virtuales y sus usuarios.
El último Informe de Pagos Minoristas del Banco Central reveló que el saldo depositado en estas cuentas ofrecidas por proveedores de servicios de pago alcanza los 121 mil millones de pesos.
Desde diciembre de 2021, las billeteras están obligadas a mantener el 100% de los depósitos de cuentas a la vista de entidades financieras para garantizar su disponibilidad y protección contra contingencias. Sin embargo, desde septiembre de 2022, el Banco Central les permitió «invertir» el 45% de ese total en Bonos del Tesoro Nacional en pesos. La nueva medida exige que estas ganancias resultantes sean compartidas con los clientes, lo que ha suscitado reacciones diversas en la industria. En su momento, la Cámara Argentina de Fintech expresó su desacuerdo con la medida, argumentando que podría impactar negativamente a un sector que ha sido elegido por millones de usuarios debido a su oferta de servicios simples, seguros y diversificados.(Pergamino Virtual)