Cuatro delincuentes ingresaron armados a robar una casaquinta en la ciudad bonaerense de San Antonio de Areco, pero una de las personas que se encontraba dentro de la casa logró esconderse y llamar a la Policía, de modo que pudo frustrar el asalto, ya que finalmente los sospechosos quedaron detenidos.
En tanto, un quinto integrante de la banda que manejaba la camioneta en la que llegaron a la vivienda para robar, pudo huir y aún no había sido localizado.
El robo comenzó con la típica modalidad de engaño: uno de los delincuentes tocó el timbre y dijo ser un empleado de la empresa Correo Argentino que necesitaba consultar por una dirección. Ante esto, un hombre que lo atendió le dijo no conocer dónde quedaba y volvió hacia el interior del domicilio. Minutos más tarde, el falso cartero volvió a tocar el timbre y cuando la persona salió a atenderlo, junto a sus cómplices la redujeron a mano armada e ingresaron a la vivienda.
La banda maniató y golpeó a los ocupantes de la casa y se apoderó de objetos de valor, sin advertir que uno de los habitantes logró escapar, esconderse y llamar a la Policía. Instantes después, arribó al domicilio un móvil policial y los efectivos iniciaron la persecución de los delincuentes, que habían huido del lugar a pie.
Tras un amplio rastrillaje en la zona, cuatro sospechosos, dos de ellos de 29 años y otros de 25 y 26, fueron aprehendidos. Los detenidos quedaron a disposición del fiscal Luis Carcagno, acusados de “robo doblemente calificado por haber sido cometido en lugar poblado y en banda y mediante el uso de arma de fuego apta para el disparo en concurso ideal con robo agravado por el uso de arma utilizada de forma impropia”. (DIB)