Salto y Benito Juarez: Avanza el saneamiento de basurales a cielo abierto

La ministra de Ambiente de la Provincia de Buenos Aires Daniela Vilar se reunió esta semana con los intendentes Julio César Marini, de Benito Juárez; Facundo Diz, de Navarro: y Ricardo D’alessandro de Salto, para evaluar los avances de las obras en los basurales a cielo abierto.
 
Benito Juárez, Navarro y Salto son tres de los municipios bonaerenses que en el mes de febrero adhirieron al plan de saneamiento de Basurales a Cielo Abierto y al programa provincial Mi Provincia Recicla, que prevé la entrega de maquinaria y equipamiento a los municipios, unidades productivas y cooperativas de reciclado, como así también transferencias directas a los gobiernos locales para el acondicionamiento y puesta en valor de la infraestructura en plantas y centros verdes.
 
“Desde el gobierno de la Provincia, con la conducción de Axel Kicillof, se tomó la decisión de crear el primer Ministerio de Ambiente para atender de manera integral estas problemáticas urgentes, acompañar a los municipios y a las familias desde el Gobierno de la Provincia en un proceso integral que va desde la separación en origen, la recolección diferenciada y la correcta disposición de los residuos, porque disponer los basurales a cielo abierto afectan seriamente la salud de las comunidades y los trabajadores”, afirmó la ministra Vilar. “Vamos a seguir fortaleciendo a los municipios y las cooperativas con maquinaria, infraestructura y herramientas para los recuperadores urbanos”, aseguró.
 
En ese marco, meses atrás el Ministerio de Ambiente de la Provincia de Buenos Aires inició los trabajos en los territorios, con un análisis exhaustivo para la elaboración de un diagnóstico y el diseño de una estrategia de intervención, y se llevó adelante el Censo de Recuperadores que trabajan en los basurales, con el fin de identificar cuáles son sus necesidades laborales y sociales específicas y así poder construir un plan inclusivo. Además, desde Ambiente se entregaron maquinarias y herramientas para fortalecer las capacidades municipales durante los procesos de saneamiento.
 
Cabe mencionar que el siguiente paso en las obras, es la construcción de una celda sanitaria en los predios donde dejarán de funcionar los basurales a cielo abierto. Se trata de una obra de ingeniería con una membrana geotextil que evita el contacto entre los residuos y el suelo, con tubos de ventilación que captan la emisión de gas metano. De esta manera, las sustancias o gases contaminantes que emiten los residuos, no entran en contacto con el ambiente y son tratadas adecuadamente.