El Dr. Juan Gallo, investigador del Conicet y director del Instituto de Investigaciones en Medicina Traslacional (Universidad Austral-Conicet), se convirtió en el primer oftalmólogo latinoamericano en recibir el premio ARVO Gold Fellow (Asociación para la Investigación en Visión y Oftalmología, por sus siglas en inglés).
“Recibir esta distinción es un gran orgullo. Constituye el resultado de largos años trabajando y de mucho tiempo de seguir formando gente joven”, aseguró el investigador. El Dr. Gallo, quien también es médico del Servicio de Oftalmología del Hospital Universitario Austral, fue reconocido por la organización de investigación en visión y oftalmología más grande y respetada del mundo. Fundada en 1928 en Washington, hoy cuenta con cerca de 10.000 investigadores en más de 75 países. El galardón se otorga en reconocimiento a sus logros, liderazgo y contribuciones a la Asociación.
Juan Gallo es oftalmólogo y doctor en Medicina. A lo largo de su trayectoria siempre procuró desarrollar un perfil profesional como médico clínico investigador: “Los años que trabajé en el Instituto Karolinska de Estocolmo, donde me doctoré, dejaron en mí una huella para toda la vida”, aseguró.
Durante su estancia en Suecia, lideró un trabajo sobre la secuela ocular de la prematuridad, publicado en el American Journal of Ophthalmology y el British Journal of Ophthalmology. Ya de regreso en la Argentina se abocó al desarrollo del trasplante de células madre de córnea, cuyos resultados también se publicaron en revistas científicas de los Estados Unidos.
Con posterioridad, su área de estudio se centró en los daños que pueden generarse en la retina como consecuencia de la diabetes. Se trata de una enfermedad crónica, cuya incidencia ha aumentado considerablemente en los últimos años, y su complicación ocular, la retinopatía diabética, es la causa más importante de pérdida de la visión en la edad laboralmente activa. “En las últimas décadas se han dado avances importantes, que han permitido disminuir la invalidez que esta enfermedad provocaba 40 años atrás y prevenir la ceguera”, contó el investigador.
El Dr. Gallo también fue uno de los iniciadores de la carrera de Medicina de la Facultad de Ciencias Biomédicas de la Universidad Austral. Desde hace unos años dirige el Instituto de Investigaciones en Medicina Traslacional donde se generan nuevos conocimientos en temas de impacto para la salud pública con el propósito de acortar la distancia entre la investigación básica y la clínica.
“A veces planeamos una trayectoria, pero en el medio aparecen oportunidades que uno no se imaginaba”, aseguró el investigador y agregó: “En mi caso, surgió la posibilidad de doctorarme en el Instituto Karolinska, la institución que otorga los premios nobeles de Medicina y Fisiología; la oportunidad de empezar la carrera de Medicina en la Universidad Austral, el desafío de mantener la oftalmología combinándola con investigación y de formar oftalmólogos jóvenes que pudieran tener también una buena formación en investigación, sin dejar la oftalmología clínico quirúrgica”.