Mauricio Cordara (45) años fue asesinado de siete balazos el viernes 18 de noviembre cerca de las 17, en calle 20 entre 43 y 44 de la ciudad de Colón. El sanpedrino llegó de Buenos Aires trayendo a los hijos del ex diputado nacional Pablo Ansaloni, a los que había retirado del colegio donde concurrían. El viaje lo realizó a bordo de un Volkswagen Vento y fue atacado sorpresivamente cuando iba a abrir el baúl, falleciendo en el sitio.
El sicario lo esperaba. La huida la programó dejando en calle 43 y 20, un Fiat Palio, color rojo, con un chofer (detenido) en el que huyeron rápidamente. En la esquina de boulevard 17 y 43, casi colisionan con una vieja camioneta color azul.
Salen de la ciudad, por Ruta 50 y es captado por cámaras de video de Bigand, Peaje, cárcel de Piñero -entre otras-.
El auto utilizado fue robado en Monte Grande, Partido de Esteban Echeverría e incautado por la AIC santafesina, en una cochera de calle México y República de Rosario, después de un seguimiento por el anillo “digital” de las cámaras de videos.
Al chofer le habrían pagado 50 mil pesos por manejar el Palio hasta nuestra ciudad. Sin embargo lo extraño de la maniobra delictiva, es que el sicario que disparó contra Cordara, estuvo en la ciudad cuatro veces, siendo el mayor misterio del expediente judicial a revelar
Las antenas de la empresa claro, captaron la señal del teléfono del asesino el 14 de noviembre, volvió el 17 de noviembre y el 18 de noviembre asesino a Mauricio Cordara.
Pero el dato más notable, es que luego de asesinar al chofer cinco días después, el miércoles 23 de noviembre regresó a la ciudad de Colón y estuvo pocos minutos.
El dato abre más hipótesis ¿A que vino tres veces? ¿Alguien de nuestra ciudad financió el ataque?. El misterio que se investiga es con final abierto.