El papa emérito Benedicto XVI, el alemán Joseph Ratzinger, murió este sábado en el Vaticano a los 95 años, informó en un comunicado el director de la oficina de Prensa de la Santa Sede, Matteo Bruni.
“Con pesar doy a conocer que el Papa emérito Benedicto XVI ha fallecido hoy a las 9:34 horas, en el Monasterio Mater Ecclesiae del Vaticano”, planteó Bruni. “Apenas sea posible se proporcionará mayor información”, agregó el comunicado enviado a las 10.32 de Roma (cuatro horas menos en Argentina).
Ratzinger, nacido en la ciudad bávara de Marktl en 1927, había sido elegido el pontífice número 265 de la Iglesia en 2005 y renunció el 28 de febrero de 2013, dando lugar al cónclave que eligió a Jorge Bergoglio como el papa Francisco el 13 de marzo de ese año.
De perfil académico y conservador, Ratzinger vivía en un monasterio dentro de los jardines vaticanos desde su renuncia, hace casi una década y la primera voluntaria de un Papa desde 1294. Su gesto de renuncia, que generó mucha polémica y revolucionó a la Iglesia, abrió las puertas a la elección ese año del argentino Jorge Bergoglio como el papa Francisco.
Golpeado por disputas internas que tuvieron su pico más alto en el primer escándalo Vatileaks que reveló el robo de documentos secretos de su mayordomo, Ratzinger sobrevivió menos de ocho años al cargo para el que había sido elegido el 19 de abril de 2005.
Tras una cinematográfica despedida del Vaticano, Benedicto XVI se recluyó un tiempo en Castel Gandolfo, la entonces residencia papal de verano, a la que llegó en helicóptero, y fue desde allí siguió el cónclave que el 13 de marzo de ese año eligió a Bergoglio como el pontífice 266 de la historia.
Una de las grandes polémicas de la vida de Ratzinger fue su paso, que él mismo reconoció, por las Juventudes Hitlerianas. En “Salt of the Earth”, de diálogos con el periodista Peter Seewald, el entonces cardenal Joseph Ratzinger reconoció que había sido inscrito en la agrupación, aunque dio a entender que no había sido voluntario.
A inicios de este año, Benedicto XVI había quedado envuelto en una última polémica, tras un informe sobre abusos en la Iglesia alemana en la época en la que Ratzinger fue arzobispo de Munich, entre 1977 y 1982.
En una carta divulgada por el Vaticano, Ratzinger mostró en febrero su “sincera petición de perdón” así como su “profunda vergüenza” a las víctimas de abusos por parte de miembros de la Iglesia tras los informes sobre pederastía en Alemania.
Durante sus siete años y medio como Papa, Benedicto XVI realizó 24 viajes oficiales, incluido uno a Brasil en 2007 para la V Conferencia del Episcopado Latinoamericano, uno de los dos que hizo a la región junto al de 2012 a México y Cuba.
Ratzinger fue “emérito” más tiempo que “regente”: elegido en 2005, renunció en 2013. Ocho años contra casi diez. Y mientras se mantuvo al costado del Trono de San Pedro, siempre trató de reiterar que “el Papa es uno solo”, facilitando el pontificado de su sucesor. (DIB)