La banda llevaba adelante distintas maniobras de tráfico de estupefacientes en las provincias de Córdoba y Misiones. El caso está vinculado a otro expediente donde a fines del año pasado se condenó a once personas que desempeñaban maniobras similares en la zona de Pergamino, Campana, Baradero y Ramallo.
El Tribunal Oral en lo Criminal Federal N°1 de Rosario condenó este mes a penas que van de los seis a los trece años de prisión a doce integrantes de una organización narcocriminal que actuaba en distintas zonas de las provincias de Córdoba y Misiones. En el debate actuó el fiscal Federico Reynares Solari, de la Fiscalía General N°3 ante los Tribunales Orales Federales de esa jurisdicción mientras que la investigación fue llevada adelante por la Fiscalía Federal de San Nicolás, a cargo de Matías Di Lello.
Esta causa se generó a partir de otro expediente donde, a fines de 2021, se condenó a once personas que se dedicaban al tráfico organizado de estupefacientes (en la modalidad de transporte y tenencia con fines de comercialización) en la ciudad de Pergamino y en el cordón industrial de las ciudades de Campana, Baradero y Ramallo, provincia de Buenos Aires, así como en la provincia de Córdoba.
Dentro de ese expediente, denominado como “causa Herrera”, se secuestraron 169 kilos de marihuana mientras que en la causa “Migoni y Koch” se descubrieron poco más de 160 kilos de marihuana y un kilo de cocaína. Hay otros tramos de las investigaciones relacionados con estas maniobras que aún están en etapa de investigación.
Las condenas
Tras el pedido de la fiscalía, los jueces Germán Sutter Schneider, Ricardo Moisés Vasquez y Omar Paulucci fijaron a Alberto Barreiro una pena de 13 años de prisión por considerarlo organizador de “tráfico de estupefacientes en las modalidades de transporte, almacenamiento, distribución y comercialización, agravado por la intervención de tres o más personas” de acuerdo a lo previsto en la ley 23.737 y por el delito de contrabando de estupefacientes previsto en el Código Aduanero.
A Arnoldo Aníbal Koch se lo condenó a 12 años por considerarlo también como organizador del tráfico de estupefacientes. Por su parte, el tribunal impuso nueve años de prisión a Juan Domingo Migoni por ser coautor del delito de “tráfico de estupefacientes en la modalidad de transporte, agravado por la intervención organizada de tres o más personas”. Con respecto a José Domingo Britez, se lo condenó a seis años y tres meses de prisión por el mismo delito.
Por otra parte, a Judith Flores y a Cristian Camargo se les fijó una condena de seis años y seis meses de prisión por ser parte de la maniobra de tráfico de estupefacientes. En esa línea, se impuso seis años de prisión a Armando Jordan Alfonzo, Rosalino Alfredo Correa, César Ramón Britez, Héctor Damián Verón y Javier Alejandro Romero. Por último, el tribunal condenó a seis años y tres meses de prisión a Ariel Gómez Da Silva.
Además de corroborar las maniobras delictivas, el tribunal ordenó el decomiso de tres vehículos utilizados y de cinco motocicletas.
La maniobra
A partir de lo investigado en primer lugar por la Fiscalía Federal de San Nicolás se pudo establecer que existía una organización que se dedicaba a realizar distintas maniobras relacionadas con el tráfico de estupefacientes. Con el objetivo de profundizar y ascender en la cadena, se inició otro expediente donde se corroboró que Koch, Migoni y Barreiro lideraban una organización que a su vez proveía de droga a otras bandas, específicamente en un hecho ocurrido en marzo de 2019 en Pergamino.
Migoni y Koch se encontraban en ese momento detenidos en el Complejo Carcelario nº 1 “Reverendo Francisco Luchesse” del departamento de Santa María en la provincia de Córdoba.
Durante la investigación, se hizo foco en cómo estaba conformada la estructura de la organización y en el despliegue geográfico que tenía. A través de intervenciones telefónicas, se estableció que en septiembre de 2019 se estaba coordinado un transporte de estupefacientes que tenía como destino final la ciudad de Córdoba. De esta forma, se detuvo a una mujer que entre sus pertenencias tenía un paquete con poco más de un kilo de cocaína.
Por otra parte, también se profundizó en las maniobras llevadas adelante en la provincia de Misiones, donde Barreiro era el organizador y financista de la organización, ya que se encarga de conseguir que le enviaran marihuana desde Paraguay. Un grupo de la organización la recibía mientras que otra fracción se dedicaba a trasladarla de manera encubierta hasta Córdoba.