Tal como se esperaba tras el acuerdo al que se había llegado en el Ministerio de Trabajo nacional, la empresa de plásticos Nicoll, ubicada en La Tablada, cerró sus puertas el martes 31 de octubre. Ahora, los 173 trabajadores que quedaron desempleados aguardan por el pago de las indemnizaciones.
Según consigna El1Digital, a pesar de que el conflicto con la empresa -que es propiedad de la multinacional Aliaxis, con base en Costa Rica y otras plantas en Perú, Chile y Uruguay- había comenzado en septiembre, cuando la firma había iniciado la gestión para finalizar sus operaciones en el país, el cierre se concretó una vez que el sindicato homologó el acuerdo indemnizatorio con los abogados de la firma, lo que se logró el 19 de octubre.
Hasta el 31 de ese mes, los trabajadores, ya sin actividades, siguieron presentándose a trabajar. Por eso, continuaron cobrando sus salarios. “El 1 de noviembre, los compañeros cobraron la última quincena, aguinaldo y vacaciones. Y logramos que el Ministerio de Trabajo mandara a la fábrica un funcionario para ratificar el acuerdo indemnizatorio”, explicó a El1 Digital Enrique Bracalenti, integrante de la comisión directiva del gremio a nivel nacional.
Cabe recordar que los ahora ex empleados cobrarán el cien por ciento de sus indemnizaciones y una bonificación extra de 15 por ciento en concepto de aguinaldos, vacaciones y dos meses de preaviso. En total, la empresa desembolsará unos diez millones de pesos.
Las negociaciones por el cierre inminente habían comenzado el 2 de octubre. Inicialmente, la empresa había ofrecido pagar solo el 50 por ciento de las indemnizaciones de cada trabajador porque alegaba que el cierre de las operaciones se había precipitado por la pérdida de 83.266.411 pesos solo en el primer semestre de 2017 debido a la caída de la actividad económica, pero tras varios encuentros con el sindicato en el Ministerio de Trabajo, se logró que los trabajadores cobraran lo que les correspondía. (InfoGEI