Mientras desarrollaba un paseo por las calles de la localidad balnearia de Pehuen Có, un lugareño se llevó una sorpresa al encontrar una rara especie de armadillo, popularmente conocido como pichiciego, que se encuentra en peligro de extinción.
“Lo vi en la calle San Martin, a una cuadra y media de la playa, pasando el camping que tiene la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE). Lo alumbré con el coche y estaba en la calle. Bajé y cuando me vio empezó a hacer un pocito”, comentó Marcelo Di Crosta al diario LaNueva.
Conocido popularmente con los nombres de pichiciego menor o pichiciego pampeano, el Chlamyphorus truncatus es la especie más pequeña de los armadillos ya que apenas mide entre 7 y 11 centímetros de largo, excluyendo la cola.
Con pelos blancos en el vientre, presenta una fuerte tonalidad rosada, y su hábitat favorito son los médanos y los suelos arenosos, poco pocos cultivados, con muchas raíces y bichos de los cuales se alimenta.
Si bien no hay datos precisos sobre la cantidad de ejemplares de esta especie que habitan en la Argentina, lamentablemente, forma parte de la larga lista de especies que se encuentran en serio peligro de extinción debido a que el avance de los cultivos destruye su hábitat natural.
Se los suele encontrar tanto al sur de la provincia de Buenos Aires como, así también, en Catamarca, Córdoba, La Pampa, La Rioja, Neuquén, Río Negro, San Juan, San Luis y en Mendoza, donde, en el año 1998, fue declarado Monumento Natural Provincial.
«Había escuchado hablar del pichiciego, así que estoy muy contento de haberlo encontrado y de haberlo dejado ahí», concluyó Di Crosta. (InfoGEI)