(CNN) — Policías de Miami Beach usaron gas pimienta contra una multitud y arrestó al menos a una docena de personas el sábado por la noche cuando la ciudad tomó medidas extraordinarias para reprimir a los vacacionistas que, según las autoridades, están fuera de control.
Las fuertes acciones para hacer cumplir la ley se produjeron pocas horas después de que el alcalde de Miami Beach, Dan Gelber, declarara el estado de emergencia y fijara un toque de queda desde las 8:00 p.m., diciendo que las multitudes que han llegado a la ciudad son «más de las que podemos manejar»
«Demasiados vienen, realmente, sin la intención de seguir las reglas y el resultado ha sido un nivel de caos y desorden que es algo más de lo que podemos soportar», le comentó Gelber a Ana Cabrera de CNN”.
El sábado por la noche cientos de personas, en su mayoría sin máscara, permanecieron en las calles mucho después de la hora establecida para el toque de queda. Con las sirenas a todo volumen los policías usaron el gas pimienta –un irritante químico– contra la multitud, lo que provocó una estampida de personas que huían, según muestra un video de WPLG, afiliada de CNN.
La policía de Miami Beach dijo la madrugada del domingo que arrestó a por lo menos a una docena de personas luego del inicio del toque de queda.
Los agentes comenzaron a dispersar a las multitudes a las 8:00 p.m. y finalmente lograron un nivel satisfactorio de cumplimiento», informó a CNN el portavoz de la policía Ernesto Rodríguez
El toque de queda desde las 8:00 p.m. y el cierre de algunas vías en el distrito de entretenimiento de la ciudad estarán vigentes hasta el martes, dijo Gelber en una conferencia de prensa el sábado. Las calzadas hacia Miami Beach desde el continente estarán cerradas al tráfico que no reside ahí a partir de las 9:00 p.m. durante las próximas noches, indicó Gelber.
Estas medidas se producen cuando Florida abrió sus puertas a los turistas después de un año de bloqueos y restricciones por coronavirus en todo el país. El gobernador Ron DeSantis se ha jactado de que el estado es un «oasis de libertad» durante la pandemia, y las personas acuden en masa a las playas y los establecimientos nocturnos libres de restricciones estatales.