El Día de la Madre, como ocurrió con los festejos por el Día del Padre, del Amigo, los cumpleaños o aniversarios, se verá cruzado por las restricciones dispuestas para combatir la pandemia de coronavirus.
En la provincia de Buenos Aires, los festejos serán forzosamente virtuales en el Gran Buenos Aires y gran parte del interior. Es una jornada sin precedentes, donde habrá llamados telefónicos y videoconferencias, tras de siete meses de cuarentena.
Serán apenas 15 los municipios, los que se encuentran en la fase 5 con mayores aperturas, los que en este particular Día de la Madre podrán celebrar reuniones sociales al aire libre.
En esos casos, de acuerdo a los consejos de las autoridades sanitarias, es importante mantener la distancia social y respetar las medidas de higiene para reducir la posibilidad de contagios de COVID-19.