Efectivos de la Policía Federal encontraron este viernes más restos óseos en la zona donde el sábado pasado fue hallado un cadáver durante la búsqueda del joven Facundo Astudillo Castro, y la familia aseguró que un testigo vio “movimientos extraños”.
Según trascendió, se trata de una clavícula humana, que coincide con uno de los huesos faltantes en el cuerpo hallado el último sábado en un cangrejal ubicado en la localidad de Cerri. Además, también se encontró cerca del “punto 0” (el lugar donde estaba el cadáver) un trozo de tela color azul que se puede corresponder con una campera del mismo color que llevaba puesta Facundo el 30 de abril cuando fue visto por última vez.
El procedimiento fue realizado por especialistas en Criminalística de la Policía Federal supervisados por expertos del Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF), y según se adelantó los restos serán enviados a Capital Federal para ser analizados el martes próximo cuando se realice la autopsia.
La medida había sido dispuesta a raíz del faltante de algunos restos óseos del cadáver esqueletizado encontrado el sábado, como las piezas dentales y las extremidades superiores. Si bien el operativo se iba a realizar el miércoles, la marea alta impidió la realización de las búsqueda hasta hoy.
Según se informó, unos 80 efectivos policiales realizaron el relevamiento en un radio de 200 metros de la zona donde fue hallado el cadáver, conocido como “Cola de Ballena” y ubicado entre las localidades de General Cerri y Villariño Viejo.
En tanto, los investigadores aseguraron que está previsto que continúen los relevamientos en la zona en sectores más alejados, de los cuales participarán, si el clima lo permite, canes, bomberos y efectivos de fuerzas federales.
“Movimientos extraños”
Luciano Peretto y Leandro Aparicio, los abogados de la madre de Facundo, Cristina Castro, presentaron hoy un escrito ante la jueza federal de Bahía Blanca, María Gabriela Marrón, para que se cite a declarar a un testigo que dijo haber visto “movimientos extraños” en el lugar donde luego fueron hallados los restos.
Se trata de un hombre que dijo que el martes 11 de agosto se hallaba en su lugar de trabajo en una posta inflamable del puerto desde donde observó “gran cantidad de luces que estaban juntas y quietas” en la zona del cangrejal.
Según su relato, eso le resultó llamativo “en plena oscuridad”, por lo que le envió “en ese momento un mensaje de audio a su pareja”, pero que no realizó ninguna denuncia hasta que el sábado se conoció la noticia del hallazgo del cadáver en ese lugar. (DIB)