En una agitada plenario virtual, el oficialismo de la UCR bonaerense logró imponer el 11 de septiembre como fecha para la presentación de listas de cara a las internas que, contra los deseos de la oposición, quedó ratificada para el 11 de octubre. Además, se votó una cláusula por la cual unos 900 dirigentes quedarían imposibilitados de participar en la elección por haber integrado listas distintas a la de Juntos por el Cambio en 2019.
El plenario radical, que se realizó ayer a través de la aplicación Zoom, dirimió las dos controversias clave que agotaban la interna partidaria: la fecha de realización de la elección y la cuestión de las sanciones. Y en ambas el oficialismo de Daniel Salvador, que postula al diputado marplatense y jefe de la bancada provincial de JpC Maximiliano Abad contra el intendente de San Isidro, Gustavo Posse, por la oposición.
Respecto del primer punto, el oficialismo impuso la moción para que se vote el 11 de octubre contra el deseo de la oposición de correrla para el 29 de noviembre, pero no es seguro que la elección se haga ese día: Daniel Salvador, que todavía es presidente del partido, conservó la facultad de correr la fecha si las condiciones epidemiológicas así lo aconsejan.
Ese último detalle revela el verdadero objetivo de la jugada: fijar lo antes posible el día del cierre de listas, bajo la hipótesis de que eso complica el armado de la oposición.
El otro punto es más controversial. El plenario aprobó suspender a los dirigentes que participaron de las elecciones de 2019 por fuera de Juntos por el Cambio –algunos fueron con el lavagnismo de Consenso Federal y otros con el kirchnerismo del Frente de Todos-, que no podrán votar ni se candidatos en esta interna. Mientras, el Comité de Disciplina del partido deberá definir si los expulsa definitivamente.
De ese modos, según pudo saber DIB, unos 900 dirigentes serán suspendidos y no podrán participar. El mecanismo prevé la confección de una lista que ya está casi elaborada, con el aporte de la dirigencia de todos los distritos, donde se denunciarán a los que fueron a elecciones, para cualquier cargo, con listas en ese momento opositoras a la que encabezaron en ese momento Mauricio Macri y Miguel Angel Pichetto.
El plenarista de la oposición Pablo Domenichini, ligado a Evolución, la línea que a nivel nacional comanda Martín Lousteau, denuncio que se está haciendo un uso parcial de las sanciones, que además no se utilizaban en el radicalismo desde los casos de Julio Cobos (cuando fue candidato por el kirhcnerismo) o de Leopoldo Moreau.
Además, el opositor Roberto Leonis, exconcejal de Esteban Echeverría, calificó de “escándalo” la situación y mantuvo un cruce muy elevado de tono con Salvador, a quien acusó de censurar la opinión de opositores del facebook donde se dejó constancia pública del encuentro virtual. El jefe partidario lo acusó, casi a los gritos, de buscar un “show” con sus acusaciones. (DIB)