En la mañana del sábado 4 de julio por orden de la Justicia Federal se realizaron más de una docena de allanamientos que desbarataron una banda que operaba desde la Alcaidía de Melincué y que tenía su zona de influencia en varias localidades del Departamento de General López, norte Bonaerense e incluso su brazo ilegal llegaba al conurbano profundo.
Los allanamientos estuvieron a cargo de efectivos de Gendarmería Nacional y Policía Federal que estaban a las ordenes del Fiscal Federal, Javier Calvo y el Juez Federal Aurelio Múrua.
Los cabecillas estaban detenidos en la Alcaidia de Melincué por causas de narcotrafico en territorio santafesino y desplegaban su actividad con ayuda de visitas que recibían ordenes para organizar la distribución.
Una de las ciudades donde la organización tenía una aceitada sincronización delictual es Venado Tuerto y se investiga conexión con localidades santafesinas, norte bonaerense y conurbano