(CNN) — El Servicio de Parques Nacionales de Estados Unidos advirtió a los visitantes del Gran Cañón que el calor extremo podría representar un peligro inusual: zapatos derretidos.
En un tuit el lunes, el NPS del Gran Cañón explicó cómo el calor excesivo puede hacer que el pegamento que sostiene las botas de montaña se derrita, haciendo que el zapato se caiga. Esta advertencia se suma a las preocupaciones adicionales sobre el calor extremo en el oeste del país.
Se pronosticaba que las temperaturas en el Gran Cañón alcanzaran por encima de los 44 grados Celsius el miércoles. El calor se hace más intenso a menor elevación.
El Servicio Nacional de Meteorología emitió una advertencia de calor excesivo para elevaciones por debajo de 4.000 pies en el Gran Cañón, advirtiendo que las temperaturas serán más extremas en el cañón. Se recomienda a las personas en la zona que se mantengan hidratadas y alejadas del sol.
“Las temperaturas pueden ser muy diferentes en las crestas y montañas que en los cañones y valles”, explicó la meteoróloga de CNN Haley Brink.
Puedes agradecérselo a un fenómeno climático llamado calentamiento adiabático. A medida que el aire se hunde en una elevación más baja, se comprime y el aire comprimido libera calor como energía. Esto causó que la masa de aire se calentara todavía más.
“Esta es la razón por la que se pueden ver temperaturas altas en la parte superior del Gran Cañón, pero temperaturas todavía más altas en el fondo del cañón”, dice Brink.
Gran parte del oeste del país está bajo un aviso de calor esta semana, ya que las altas temperaturas afectan la región.
Se espera que el norte de California alcance niveles récord antes de fin de semana.
“Se pronostica que esta ola de calor se mantendrá durante el resto de la semana, ya que se ha establecido una cresta de alta presión sobre la región”, dijo Brink.
Si bien las altas temperaturas son típicas del oeste en el verano, las máximas de esta semana probablemente sean incluso las temperaturas más cálidas del año.
“El calor como este solo ocurre unas pocas veces al año”, dijo el Servicio Meteorológico Nacional en Sacramento.
Las altas temperaturas coinciden con una temporada de incendios forestales que la pandemia de coronavirus ya ha hecho más complicada. El Centro Nacional Interagencial de Incendios predice un riesgo “superior a lo normal” para grandes incendios este año en partes del suroeste del país.
Los incendios continúan ardiendo en Arizona. El incendio de Magnum en la parte noroeste del estado ha forzado el cierre temporal del borde norte del Gran Cañón. Se espera que la temporada de incendios continúe hasta bien entrado el mes de julio.