Esta semana el hogar de ancianos Reminiscencia de Tandil recuperó la alegría de muchos de sus habitantes gracias a la colocación en una de sus puertas, de un sistema que permite que familiares puedan tener contacto físico con los abuelos sin riesgo de contagio de coronavirus.
El diseño utilizado en Tandil consiste en una manga separada por un acrílico, que permite que los familiares y los ancianos tengan la oportunidad de abrazarse y sentir el cariño.
“Lo saqué de internet, miré unos geriátricos en España que lo tenían y nos pusimos en campaña. Lo estudiamos bien, estuvimos dos días mirando que no entrara aire. Sabemos que estéticamente no es lindo, pero queríamos que estuviera firme, adaptándolo a la puerta”, explicó a El Diario de Tandil Anahí Soulié.
“Acá somos 20 personas trabajando, pasamos a ser sus familias, nos tuvimos que adaptar a ser peluqueras, manicuras y todo para dejarlas conformes. Hicimos juegos, gimnasia, pero ya los últimos días no nos querían ni ver, estaban cansadas de nosotros”, agregó.
“Cuando les dimos la sorpresa, les encantó, están fascinadas. Se levantan con ganas, se preparan, se pintan, se peinan porque van a venir sus hijos a verlos”, contaron sobre el dispositivo implementado.
“Fue una manera de devolverles algo de lo mucho que nos dieron. Esto está también para los demás abuelos, me gustaría que en los otros hogares también tengan la posibilidad de compartir esto. Que vengan, que pregunten, que acá vamos a estar para contarles lo que nosotros hicimos”, destacó. (InfoGEI)