El dengue es una de las batallas que más cuesta. La curva de infectados por esta enfermedad, que transmite el mosquito Aedes aegypti, no detiene su ascenso en la provincia de Santa Fe, en consonancia con lo ocurrido en el país y la región. Hasta el momento, los casos de dengue en el año son 3.701. En cambio el coronavirus, una infección distinta en cuanto a la vía de transmisión, registra 244 infectados, con apenas dos en las últimas dos semanas, permitiendo ésto que la provincia ingresa desde hoy a una fase más relajada de la cuarentena. La cantidad de fallecimientos por ambas enfermedades en el año es coincidente: 3
La provincia de Santa Fe no escapa a la realidad del resto del país, la región y el continente en relación al dengue. La Organización Panamericana de la Salud alertó en agosto de 2019 de «un nuevo ciclo epidémico de dengue en la región de las Américas, luego de dos años de baja incidencia de esta enfermedad». En febrero último indicó que «el número de casos reportados hasta la semana 52 (diciembre) del 2019, es el mayor registrado en la historia de dengue en toda América».
«El dengue es una batalla muy difícil», según distintas fuentes consultadas. En la provincia de Santa Fe se trabaja con operativos de fumigación y una constante vigilancia epidemiológica, que implica la actuación de asistentes sanitarios apenas se notifica un caso.
El último informe del Ministerio de Salud de la Provincia, dado a conocer el 7 de mayo, detalla que en la Semana Epidemiológica Número 18 (SE 18) hubo 491 nuevos casos de dengue. La expectativa es que la cantidad de enfermos se reduzca al haber menos mosquitos con la llegada del frío.
El número de personas con dengue es de 3.701, de las cuales 117 fueron consideradas casos probables, mientras que otras se encuentran en estudio.
El mayor número de enfermos de dengue durante el año se encuentra en el noroeste santafesino, en el departamento General Obligado, con 1.613 casos. Reconquista, cabecera del departamento, registra 1.224. Es la ciudad de la provincia con más casos.
En contraposición, el departamento General Obligado no cuenta con enfermos de coronavirus.
El segundo departamento en cantidad de infectados de dengue es Rosario, con 860. La ciudad de Rosario tiene 768, Granadero Baigorria 52, Funes 20, Villa Gobernador Gálvez 10, Arroyo Seco 5, Pérez 3 y Pueblo Esther 2. En tanto, son 109 los que padecen coronavirus en este departamento.
San Lorenzo es el sexto departamento con contagiados por dengue, con 96: Fray Luis Beltrán 69, Roldán 15, Capitán Bermúdez 7, San Lorenzo 4 y Puerto General San Martín 1. El total de personas con coronavirus en todo el departamento es de 16.
La mayoría de los casos confirmados de dengue fueron considerados autóctonos, ya que no mostraron ningún antecedente de viaje. «El dengue es nuestro, está acá y hay que controlarlo», manifestó la secretaria de Salud provincial, Sonia Martorano.
«El dengue tiene que ver con un contexto nacional e internacional», dijo la funcionaria, antes de recordar que hubo «casos importados» de coronavirus, a raíz de viajes que se hicieron durante el verano a países con «una complicada situación» con esta enfermedad, como Brasil y Paraguay.
«Luego de esos casos importados tuvimos muchos casos autóctonos y muchos casos por nexo epidemiológico. Realmente es una situación que nos ha superado ampliamente en relación a otros años, pero esto no ha sido solamente en nuestra provincia sino también a nivel nacional y a nivel internacional», dijo.
Si bien desde sectores de la oposición entienden que los esfuerzos estén puestos en el coronavirus, se cuestiona el accionar del gobierno de Omar Perotti en relación al dengue. En la Legislatura provincial ya tiene media sanción un proyecto de la oposición que solicita la declaración de la emergencia sanitaria por dengue en Santa Fe por el plazo de tres meses.
Motivos de la expansión
El médico especialista en clínica médica e infectología, Osvaldo Teglia, entiende que las razones de la «expansión del dengue en las últimas décadas son el cambio climático global, extensiva infestación de mosquitos, déficit en el control del vector, urbanización no planificada (desorganizada), aumento de los viajes internacionales y deforestaciones».
«El aumento de la densidad de población en áreas urbanas acarrea como consecuencia una urbanización no planificada, que se caracteriza por viviendas precarias, sin adecuada gestión de residuos, con basurales a cielo abierto, acumulación de recipientes no biodegradables que sirven para criaderos y a veces falta de agua potable y cloacas, todos detonantes para la difusión de la enfermedad», manifestó.
Teglia manifestó que el dengue y el coronavirus «son dos infecciones distintas en cuanto a la vía de transmisión».
«El virus del dengue es transmitido por la picadura de mosquitos hembra del género Aedes, principalmente Aedes aegypti. Los mosquitos adquieren el virus picando a una persona infectada. Al chupar la sangre, el virus se incorpora en el insecto y luego de un período de incubación en éste, cuando pica a otra persona sana, inocula la sangre infectada que contiene en su intestino, perpetuando la enfermedad», dijo.
«Por el otro lado tenemos el virus de coronavirus. Por lo que sabemos hasta acá, porque se trata de algo nuevo, se transmite por vía respiratoria, al toser, estornudar», manifestó.
El especialista manifestó que existe un denominador común entre el dengue y el coronavirus: «la pobreza y la marginación social».
«El autocuidado es clave y para eso es fundamental entender, conocer e informarse de cómo prevenirse, algo difícil en ese sector vulnerable de la sociedad», señaló.
«Después está todo los referido a las condiciones sanitarias generales. Con el coronavirus nos está yendo muy bien en general, pero es más difícil en las viviendas precarias», planteó.
«Cómo hacemos distanciamiento social con mucha gente en una misma casa o cómo se hace el lavado de manos sin agua. La gente socialmente más vulnerable es la que se encuentra más expuesta al dengue y al coronavirus». sostuvo.(La Capital)