Todo comenzó el pasado jueves 23 de abril, cuando ingresó un paciente al Hospital General Interzonal San José de Pergamino, con un cuadro grave respiratorio. El hombre falleció y la familia le pidió al médico clínico que lo atendió que le realizara el hisopado para descartar se tratase de un caso de coronavirus; el profesional lo efectuó y lo mandó para que se analicen los resultados.
Finalmente se supo al día siguiente que el resultado fue negativo y se descartó que haya sido una muerte por Covid-19. Sin embargo, los rumores comenzaron a circular por la ciudad, desatando todo tipo de especulaciones. Por lo tanto, desde el nosocomio emitieron algunos comunicados, pero nunca aclararon la situación.
El director del hospital, Jorge Adame, firmó una nota en la que acusaba al médico que hizo el hisopado de proceder de manera unilateral, haber transgredido las normas y no adecuarse a los protocolos. Además, advirtió que podría haber sanciones, lo que derivó en un repudio generalizado del personal que se desempeña allí.
Aparentemente, y según lo que intentan instalar desde el directorio, la actitud del profesional fue no esperar a que el Comité de Crisis determinara la realización del estudio. De todos modos, como una defensa a su posición, los compañeros salieron a aclarar que es imposible que lo haya realizado en secreto y haya enviado el test al laboratorio para ser analizado.
Según las informaciones, la infectóloga del hospital San José había autorizado la realización del estudio. En este marco, se rumorea también que el reto al profesional esconda una cuestión política de fondo, teniendo en cuenta que el médico señalado fue uno de los candidatos a ser el director ejecutivo antes de que Adame fuera designado.
Los profesionales de la salud mostraron su repudio hacia la actitud del director por la reprimenda a su compañero y desde el sábado pasado vienen realizando distintas protestas en el hall del nosocomio, debajo de la oficina de Adame. Entre aplausos y discursos, bajo la consigna «barbijos sí, mordazas no», hicieron conocer su descontento.
En este sentido, piden también la renuncia de José Agudo, director adjunto. Las críticas están basadas en que es abogado y no sabe de medicina, y al parecer porque habría acomodado gente cercana a su círculo íntimo en la administración. Por tal motivo, pidieron que abandone su cargo.
Al día siguiente de la primera protesta, desde el hospital se envió otro comunicado alertando que no había problemas con el médico en cuestión. De todos modos, la denuncia sigue en pie, la están manejando desde el gremio Cicop en la seccional local, y este martes volvieron a realizar las protestas en el hall, exigiendo respuestas y solicitando que cambien los nombres del directorio.(Agencia Nova)