La golpiza de una patota a un joven en el predio de la Sociedad Rural no fue un hecho aislado. Las trifulcas y peleas ocurren cada fin de semana con menos o más heridos de distinta consideración. Los menores ingresan de madrugada a lugares de expansión nocturna. Se vende bebidas en botellas –entre otras cosas no permitido- . Los vecinos de calle las 48, 47 y 46, con sus transversales les toca cada fin de semana vivir una odisea( olores orines, roturas de recipientes de residuos, luces, macetas etc.). Por ahora el milagro de la vida le gana a la muerte. En este contexto parece que la Comuna tuviera dos varas para “medir”. Una para la gente de los barrios y otra a los que se “creen impunes” desde hace muchos años.
Solo describiremos algunos de las decenas de casos. Muchas veces en esas peleas de madrugada la tragedia rozó a nuestra ciudad. El 18 de diciembre de 2018, un adolescente de 13 años resultó con golpes y lesiones en la cara que fueron atendidos en el Hospital Municipal “Eduardo Morgan” y el agresor, luego del episodio, concurrió a una previa donde a su vez recibió un botellazo que le produjo una herida cortante en la cara.
El 18 de setiembre de 2019, un vehículo quedó destruido por una pelea entre jóvenes en calle 131 y 47. Habían salido de un sitio de expansión nocturna.
El 22 de julio de 2019, hubo una fuerte trifulca en calle 46 y Ruta 8, el episodio ocurrió a las 4.40 de la madrugada del domingo, aparentemente cuando “M.P” de 23 años intervino en una discusión y una riña. Hubo lesionados.
El 26 de noviembre de 2017, en Ruta 8 y calle 46 a la salida de un sitio de expansión nocturna, dos mujeres adolescentes de 16 y 17 años, atacaron a otra de 16. Las agresoras tiraron al suelo y golpearon fuertemente a su ocasional adversaria. La víctima fue trasladada al Hospital Municipal.
El 22 de diciembre de 2019, en la madrugada del domingo ocurrió una trifulca donde habrían intervenido más de una docena de jóvenes. La pelea se desarrolló en su etapa final en la estación de Servicio Rhasa, ubicada en boulevard 50 y Ruta 8.
Los agentes bonaerenses lograron aprehender después de los desmanes que llegó a aterrorizar a empleados presentes a ocho jóvenes con domicilio en Pergamino.
Según pudimos reconstruir en base al aporte de testigos de los incidentes, los enfrentamientos habrían comenzado en cercanías de la confitería ubicada en Ruta 8 y calle 46.La pelea habría sido por una provocación de otro grupo que estaba motorizado. Los pergaminenses se encerraron en un baño y se debió romper la puerta para sacarlos.
En el transcurso de 2019, en un Club Céntrico se organizaron fiestas de menores de hasta 10 años. En los festejos de primavera en ese club en uno de los lugares donde se realizaba el tradicional festejo concurrieron chicos desde los 10 años al “baile” y duró hasta las dos de la madrugada. Lo máximo que pueden estar a esa edad es hasta las 23
Los vecinos del lugar pudieron observar al menos dos de ellos con latas de cervezas bebiendo en la vereda. ¿Quién otorgó el permiso para realizar el evento?
El 16 de junio de 2018, mientras la Policía atendía un trágico accidente en la primera curva del Aero Club, donde murió una mujer, un joven era atacado a piedrazo en calle 48 entre 21 y 22. La victima estuvo grave al impactar una piedra en su cabeza. Los agresores (varios) huyeron y además rompieron vidrios de un garaje en su huida. Algunos de ellos ingresaron a una fiesta de 15 realizada en calle 48 entre 20 y 21.
Sin embargo a las pocas semanas hubo una pelea entre un mozo de reconocida “Rotisería” y otro joven que identificaremos como “M” y que se movía en una cuatro por cuatro color blanca.
La discusión habría sido por temas de comercialización. En este sentido, “M” salió a la calle y con un objeto contundente rompió la luneta trasera del auto del padre del mozo. El agresor huyó a toda velocidad en la camioneta. El agredido al ver los destrozos, fue presa de la desesperación y pateo varias cosas, entre ellas los vidrios de un garaje al cual destrozo.
En otra fiesta privada en el 2018, y en un Club, ubicado en la periferia chicos de 12 años realizaban su despedida de clases. Un hombre “embriagado” trató de abusar de una niña. Sus propios compañeros en medio de gritos la salvaron del infierno en la tierra. En archivo en los últimos tres años existen agresiones como para escribir un libro. La presencia del Estado haciendo cumplir las reglamentaciones puede salvar vidas. Lo descripto es un pequeño porcentaje de lo que sucede en la noche colonense.
. Los Pibes no son un negocio
La Ley 14.050 de la Provincia de Buenos Aires es clara y contundente. Entre los principales artículos se encuentran dos de suma importancia: Los menores de entre catorce a diecisiete años sólo podrán permanecer en los establecimientos y locales comprendidos en el artículo 1° hasta las veintitrés horas como horario máximo. La apertura de puertas para el inicio de actividades se realizará a partir de las diecisiete y treinta horas al solo efecto que los padres, tutores o responsables legales de los menores tengan la posibilidad de realizar la revisión de las instalaciones. A partir de las dieciocho horas se dará inicio a la actividad bailable.
En tales establecimientos no se realizará venta, expendio y/o suministro a cualquier título de bebidas alcohólicas, cualquiera sea su graduación, en la modalidad conocida como “canilla libre” en locales bailables, confiterías bailables, discotecas, discos, salas y salones de baile, clubes, pubs y bares. Se entiende por “canilla libre” a la entrega ilimitada ya sea en forma gratuita o mediante el pago de un precio fijo previamente concertado.
Un problema que nos involucra a todos como parte de una sociedad que no tendrá futuro si no comienza a cuidar a sus jóvenes(Foto ilustrativa)