Pergamino: Antes de dejar el poder, Vidal empodera a un intendente en la mira de la justicia

Desde que María Eugenia Vidal llegó al poder, visitó ocho veces al intendente de Pergamino, Javier Martínez. En el último año, su presencia se potenció. Todo indica que esa generosidad responde a un armado que la mandataria quiere dejar andando en la provincia.

¿Nace el Vidalismo? un encuentro que tuvieron días atrás Vidal y varios intendentes de la Segunda Sección electoral, dejó esa sensación. Pero más allá de las especulaciones, lo cierto es que la gobernadora no oculta su deseo de empoderar a Martínez como uno de sus alfiles más importantes en el territorio.

Ser el jefe comunal de una ciudad clave para la producción del norte bonaerense, en donde se alzan grandes intereses del agronegocio, además de poseer un perfil político cercano a la mandataria, serían las claves.

La polémica en esta decisión, es que Martínez se encuentra hoy en el foco de la Justicia Federal luego de que se haya confirmado que parte del agua de Pergamino contiene 18 tipos de agroquímicos y se registraran decenas de casos de cáncer y otras enfermedades graves. Para peor, el juez Carlos Villafuerte Ruzo, a cargo de la causa, aseguró que el intendente “conspira contra la investigación”, y además, el Juzgado ordenó la detención de dos productores rurales e imputó a otros dos funcionarios del municipio de Pergamino, por considerarlos responsables de no controlar las fumigaciones cuando estas estaban prohibidas.

En el histórico fallo que se dio en septiembre de este año, la Justicia federal pidió limitar las fumigaciones aéreas a menos de 3 mil metros y a menos de mil, de forma terrestre. Eso, más las imputaciones a los responsables materiales y políticos de las fumigaciones con agroquímicos, generó un paradigma inédito en la provincia y en el país.

                                  LAS OCHO VISITAS DE VIDAL A PERGAMINO

En cuatro años, la mandataria arribó a ese municipio en reiteradas oportunidades. A veces junto al propio presidente, otras veces desde su propia agenda. En el último año, a pesar de la derrota electoral, la mandataria bonaerense continuó su curso de visitas y eso llamó más la atención.

La primera vez fue el 14 de diciembre de 2015, en donde el entonces flamante presidente Macri anunció que las retenciones al campo iban a bajar gradualmente. Hacerlo en Pergamino fue todo un símbolo: esa es una de las zonas más ricas y de mayor producción de soja transgénica.

La segunda estuvo programada para una recorrida por la nueva avenida Champagnat. Días después, su tercera llegada se dio para hacer una recorrida por las zonas inundadas en diciembre de 2016, luego de que la ciudad tuviera graves consecuencias por las lluvias y miles de evacuados. Fueron las primeras imágenes de una gobernadora activa ante las urgencias de la provincia.

Su cuarto arribo a esa ciudad fue para la entrega de 148 viviendas, junto al intendente Martínez en enero de 2018. En tanto, la quinta visita de Vidal fue para anunciar la construcción de una prensa hidráulica de contención en Puente Rocha en mayo de 2018.

También, la gobernadora volvería a pisar suelo pergaminense para la inauguración de una Estación de Bombero en julio de 2019.

A partir de allí, la conmoción local surgida a partir de que la justicia determinara que parte del agua de Pergamino se encontraba contaminada con diferentes tipos de agroquímicos, hizo que Vidal se sintiera cada vez más incómoda en hacerse presente.

Por eso, sus dos últimas visitas como gobernadora evitaron toparse con ese drama. Su anteúltima aparición fue para la marcha del Sí se puede, el 16 de octubre de este año, que juntó a un número no menor de vecinos en la Plaza Merced.

Allí, se dio el primer encuentro cara a cara entre la mandataria y la organización Madres de Barrios Fumigados. Según contaron las integrantes de ese espacio ambientalista, Vidal les dijo que “bajaran sus carteles”, y eludió sus reclamos.

La última visita de la gobernadora en Pergamino se dio para la inauguración de un centro obstétrico, el pasado miércoles 4 de diciembre.

La preferencia de Vidal por Pergamino, es notoria. El apoyo a Martínez puede ser leído de dos formas: un respaldo desde Provincia para que el intendente no sea acorralado por la investigación sobre el agua contaminada que encabeza la Justicia Federal; o un deseo legítimo por ponderar a ese intendente como uno de los nuevos referentes del vidalismo.

                                           VIDAL VA POR LA SEGUNDA

En esa mini cumbre de intendentes que se dio el 24 de noviembre pasado en Pergamino, participaron casi todos los jefes comunales que responden a Juntos por el Cambio de esa Sección. Estuvieron presentes Claudio Rossi (Rojas), Cecilio Salazar (San Pedro), Gustavo Haroldo Perie (Ramallo), Francisco Ratto (San Antonio de Areco) y Fernanda Antonijevic, que no pudo retener su intendencia en Baradero.

La ausencia más llamativa fue la de Manuel Passaglia (San Nicolás), que ni siquiera mandó a uno de sus secretarios más cercanos. Eso fue leído como un mensaje, pese a que el intendente habría llamado para disculparse y proponer a su localidad como la futura sede de la cumbre vidalista.

También no estuvo presente el exministro de Vialidad, Javier Iguacel, hoy a cargo de la intendencia de Capitán Sarmiento y un hombre más ligado al macrismo.

“Estamos en una nueva etapa, con más y mejores intendencias en la sección. Pero ahora seremos oposición en Provincia y en Nación y tenemos la obligación de ser una coalición responsable. Para eso necesitamos fortalecer nuestra identidad y trabajar dentro de Juntos por el Cambio”, fue parte del discurso del intendente de Pergamino, Javier Martinez, que había hecho de anfitrión.(Infocielo)