La ley conocida como Ley Evita estableció el sufragio universal y, aunque fue sancionada en 1947, recién se aplicó en las elecciones presidenciales que se llevaron a cabo el 11 de noviembre de 1951.
El Felipe Pigna cuenta como en el Siglo XIX arrancó el largo proceso que culminó con la aplicación de la llamada Ley Evita.
El derecho de las mujeres a elegir y ser elegidas para todos los cargos políticos nacionales fue el cierre de una lucha de años que dividió a la sociedad argentina. En 1945 Perón impulsó el voto femenino y hasta se habló de la posibilidad de que el presidente firmara un decreto.
Sin embargo, durante la campaña de 1946 peronistas y antiperonistas incluyeron en sus plataformas el sufragio femenino. El acompañamiento de Eva Duarte y su protagonismo en la campaña le dieron un lugar central a la mujer en la escena política. Eva Duarte de Perón fue oradora en el cierre de acto de campaña en el Luna Park.
Las mujeres participaban de las actividades políticas, pero sin todavía tener el derecho a votar y ser votadas. Al inaugurar las sesiones del Congreso Nacional en 1946, el presidente Perón anunció que enviaría un proyecto de ley reconociendo el sufragio femenino y sus derechos políticos y sociales.