María Belén Francioni es la coordinadora del área de Inclusión y Discapacidad de la Comuna de Wheelwright, un espacio fundamental en el desarrollo de tareas sociales y de inclusión que marca un perfil diferencial en la gestión de lo público.
El eje fundamental en el que se basa el trabajo de la cartera es el del acompañamiento, orientación, asesoramiento, a las personas con discapacidad y sus familias, sobre todo desde los derechos que tienen aún por adquirir.
En ese sentido, Francioni explica: “interactuamos con las instituciones que lo requieran, pero no se trabaja específicamente con alguna de ellas, sino que se realiza un asesoramiento general. El alcance de las políticas implementadas es amplio, ya que se extienden hacia localidades vecinas, dado que no en todas hay un área específica, y recibimos gente de Máximo Paz, Alcorta, Carreras, Juncal, Hughes y Labordeboy”.
En cuanto a la situación de las obras sociales y, puntualmente, a los derechos que deben brindar, la funcionaria indica que muchas veces hay que recurrir al asesoramiento de la abogada comunal sobre los recursos de amparo, ya que ni siquiera con cartas a documentos las empresas responden a los pedidos de las personas, aún cuando cuentan con un certificado de discapacidad.
Un problema semejante se produjo con las bajas de las pensiones dispuestas por el gobierno nacional. En los casos que desde Nación se consideró que no eran compatibles con otros beneficios que esas personas recibían y a partir de los casos de consulta, desde la Comuna se iniciaron trámites de averiguación en coordinación con el área de Acción Social.
Junto con Francioni también trabaja Agustín Chávez, que es ciego, tiene 21 años y es estudiante de abogacía. En su tarea conjunta se intenta dar respuestas diariamente a los familiares que se acercan. Francioni expresa que desde 2017, cuando asumieron el cargo, se fueron dando cuenta que había una significativa falta de información sobre los trámites disponibles para continuar adquiriendo derechos.
“También desde el área se gestiona el subsidio de tarifa social del gas y la compra de pasajes para el transporte. Otra de las actividades es la tramitación del Símbolo Universal de Acceso a través de una planilla de la Agencia Nacional de Discapacidad. Y un hito histórico fue haber creado la Junta Comunal de Discapacidad, ya que anteriormente había una Junta que no pertenecía a la Comuna que quedó sin efecto y hubo mucho tiempo que a las personas se les vencieron sus certificados y debían dirigirse a Venado Tuerto, Elortondo o de otras localidades”, enumera.
Sobre la perspectiva estratégica que reconocen para la creación de este nuevo órgano de gestión, Francioni destaca: “nos propusimos crear el área para recuperar un derecho que se había perdido y volver a poner en funcionamiento esa Junta desde la Comuna, para lo cual capacitamos profesionales”. Una vez que los profesionales evalúan a las personas, transmiten la información, se carga al sistema y posteriormente se imprimen los certificados que se entregan en mano.
Desde el área además se brinda un transporte para los alumnos que concurren a la Asociación Civil Coinsoldi que antes se trasladaban en remises que debían sustentar con sus propios recursos. Francioni señala que en su momento la Conadi entregó los fondos para comparar el minibús junto con la rampa, sin embargo, el anterior gobierno adquirió solo el minibús, pero no la rampa, por lo que se generan inconvenientes al momento de los traslados.
En este punto, la funcionaria resalta que al ingresar a la Comuna se encontraron con carpetas y documentación perteneciente a la Conadi donde intimaban a la gestión anterior a hacer la rendición del dinero correspondiente. “Esos problemas heredados se transforman en una traba para generar nuevos proyectos, sin embargo, nosotros seguimos gestionando para ampliar las oportunidades”, sintetiza.