Tal como el PJ Bonaerense hizo hace apenas unas semanas, el Partido Justicialista, en el orden nacional, celebró hoy, en el microestadio de Ferro Carril Oeste, un Congreso en el que se habilitó a los apoderados a conformar las alianzas necesarias para encabezar el frente electoral que competirá contra Cambiemos en las presidenciales de este año.
Unos 647 congresales le dieron mandato a las autoridades para, en palabras del presidente del partido, José Luis Gioja, «integrar el mejor frente electoral posible, con todas las fuerzas políticas, sociales, gremiales y culturales que tengan como límite lo que está adentro de la Casa de Gobierno».
Ese mensaje fue avalado por la primera plana del peronismo, a excepción de Cristina Fernández de Kirchner, que mueve sus hilos desde el Instituto Patria. Dirigentes como Daniel Scioli, Agustín Rossi, Felipe Solá, Fernando Espinoza, Gildo Insfran, Verónica Magario, Fernando Espinoza, Hugo Moyano, Hugo Yasky, entre otros.
En la previa habia quedado claro que el mensaje tenía a Sergio Massa y a los gobernadores de Alternativa Federal como principales destinatarios, aunque sectores «progresistas» fueron incluidos en la convocatoria, que tiene como «filtro» a las Primarias.
A su ingreso, el diputado Eduardo “Wado” de Pedro mostró un interesante gesto de apertura: convocó a Sergio Massa y los gobernadores del peronismo a integrarse en una “gran interna opositora” de la que afloren las candidaturas que se opondrán a la de Mauricio Macri en las elecciones generales.
“Llamamos a conformar un gran frente opositor sin exclusiones, e invitamos a Sergio Massa y a los gobernadores peronistas a dirimir roles y candidaturas en las paso que fija la ley”, escribió en Twitter el miembro del ala más dialoguista y rosquera de La Cámpora.
Claro que ese gesto no es autónomo, si no que está alineado con el pensamiento de Cristina Fernández de Kirchner, que viene mostrando inusitados gestos de apertura, que la llevaron a hacer las paces con dirigentes como Alberto Fernández -uno de los encargados de tejer las alianzas de este año- y Felipe Solá, pero además a entablar diálogos con otrora acérrimos opositores como Eduardo Duhalde o Pino Solanas.
En un escenario en el que las encuestas marcan que 6 de cada 10 electores buscarán una alternativa opositora, en un contexto de creciente pesimismo respecto de la economía y de desaprobación haciaMauricio Macri, esta posición del kirchnerismo se ajusta más a una vocación pragmática que a una sincera búsqueda de diálogo.(INFOCIELO)