El descontento por un nuevo tarifazo en los servicios públicos y la preocupación social que genera la crisis económica que golpea al entramado productivo y laboral quedaron visibilizados ayer en una movilización desarrollada en Casilda para decir «basta» a las políticas de «ajuste» implementadas por el gobierno nacional.
La Capital indica La actividad, organizada por la Multisectorial local con un fuerte acompañamiento de la Intersindincal demostró que permanece intacto el espíritu de «unidad y lucha» con que hace unos meses diversas organizaciones resolvieron «ganar la calle» para expresar reclamos.
Los manifestantes partieron desde la esquina de 25 Mayo y Buenos Aires, avanzó por el microcentro y culminó frente al Palacio Municipal, donde se leyó un documento que fue entregado a las autoridades locales. Durante la recorrida la marcha sumó gestos de aprobación por parte de comerciantes y empleados que salieron para saludar y dar su señal de apoyo a la convocatoria donde confluyeron trabajadores, productores agropecuarios, jubilados y estudiantes, entre otros sectores.
Si bien a diferencia de manifestaciones anteriores no abundaron los oradores, fue suficiente con la lectura de un consensuado entre los sectores que forman parte de la Multisectorial y la Intersindical.
En ese marco le achacaron al líder de Cambiemos que en su gestión «aumentaron permanentemente» los precios «del transporte, la electricidad, el agua, el gas y los combustibles». Y puntualizaron que «desde abril de 2018 a los anuncios de este año» los incrementos «son hasta cinco veces lo acordado en los salarios de las paritarios», lo que calificaron como «un robo» y «una estafa a los bolsillos del pueblo, en particular los trabajadores y jubilados».
Asimismo destacaron que «hoy nuestros hijos e hijas, aquellos que tienen el privilegio de estudiar en la universidad, tienen que pagar 160 pesos el boleto (de colectivo) para llegar a Rosario», y manifestaron que «no hay salario que aguante».
El comunicado también hace hincapié en «la oleada de despidos, suspensiones y cierres de empresas y comercios por la crisis económica que (en Casilda) y la zona se refleja con dificultades tremendas en la agroindustria».
Pero las criticas fueron más lejos al sostener que «no se recuerda otro gobierno tan enemigo del trabajo y la producción nacional», y fustigar la decisión de abrir las importaciones «sin escrúpulos para que ingresen productos que se pueden hacer con trabajo local».
Ante lo descripto la Multisectorial e Intersindical casildenses rescataron la importancia de haber creado un Foro en Defensa del Trabajo y la Producción para «buscar alternativas a estas políticas de ajuste» al tiempo que bregó por sostenerlo «organizándonos junto a la Federación Agraria, las Pymes y comerciantes. En esta zona es primordial que se valorice la producción local, que haya incentivo, que se baje la tasa de interés, se regulen los mercados financieros y el flujo de capitales poniendo al Estado a favor de las grandes mayorías».
También fustigaron al presidente Macri por su «ensañamiento» contra los jubilados, preguntaron si «sabe» cuánto aumentaron los medicamentos y que es imposible vivir con el haber mínimo».
Y el reclamo en busca de respuestas también incluye al campo donde «no todo es color de rosa», aseguran para luego hacer referencia a las consecuencias tanto de la sequía como de las actuales inundaciones que afectan distintas zonas del paí