La forma del hurto descuidista abunda y se deben tomar prevenciones al dejar motos, bicicletas y teléfonos celulares en sitios públicos. En este sentido, Verónica gallo dejó su teléfono celular por algunos minutos en el techo de un auto estacionado en calle 58 entre 20 y 21, y cuando fue a recuperarlo ya no estaba.
En un segundo caso, la víctima fue Antonio Sánchez que estacionó el vehículo en calle 43 entre 11 y 12 del barrio Centenario, dejando el teléfono celular en el habitáculo. El propietario se apeó por cinco minutos para realizar un trámite y cuando regreso se encontró que el medio cotidiano de comunicación faltaba.