Organizaciones sociales, gremiales y referentes políticos se manifestaron ayer frente a las oficinas de la empresa distribuidora de gas natural en San Nicolás. El malhumor, la angustia y la bronca se expresaron con reclamos airados. Un grupo de manifestantes lanzó huevos al sector de ingreso. Hubo vecinos que mostraron facturas que llegan a los 9.000 pesos.
El malhumor social provocado por el incremento en las tarifas tuvo ayer un capítulo caliente en San Nicolás a partir de la manifestación que realizaran ayer organizaciones sociales (CTEP, Movimiento Evita, Barrios de Pie, CCC, MTE), gremiales (Suteba, ATE, CTA, entre otros) y sectores partidarios (PJ) en las puertas de las oficinas de Litoral Gas. El dato saliente es que a la protesta se sumaban los ocasionales automovilistas que pasaban por el lugar haciendo sonar sus bocinas en señal de apoyo. Un grupo de manifestantes expresó su bronca lanzando huevos en el sector de ingreso a la oficina, mientras sobre calle España se multiplicaban las personas que mostraban la última factura con montos que -en algunos casos- superaban los 9.000 pesos. Agregamos que Litoral Gas es la misma empresa que abastece de Gas natural a la ciudad de Colón. En nuestra ciudad están llegando facturas de entre 6000 y 9000 mil pesos.
“Me vino una boleta con dos cuotas de 2.400 pesos. Yo no puedo pagar esto”, afirmó Esmeraldo González, un jubilado nicoleño que cobra un haber apenas superior a la mínima. “En la anterior factura me habían venido cuotas de 1.500 pesos, que pude pagar con mucho esfuerzo. Y las boletas anteriores eran de 600 pesos”, agregó el jubilado mientras exhibía las tres últimas facturaciones del servicio de gas. “No sé cómo voy a hacer. No me alcanza lo que gano. Voy a tener que dejar de comer para poder pagar esto”, completó González.
Zunilda, que recibe una pensión por viudez y trabaja de empleada doméstica, no pudo esconder su angustia al mostrar una factura de poco más de 9.000 pesos, a pagar en dos cuotas de $ 4.560. “Es imposible. No puedo pagar esto”, expresó la vecina con gesto de preocupación. “Vengo a reclamar una respuesta, que me aclaren porqué me llega esto si apenas tengo una estufa encendida a la vez”, comentó.
La escalada tarifaria para Carlos López, desocupado desde junio tras ser despedido de una panadería, también provoca malestar e incertidumbre. “No sé como voy a hacer. Me vino una factura de 7.000 pesos y no tengo trabajo. Me cuidé, pasé frío, prendía el termotanque sólo para bañarme. Así y todo me llega esta locura”, dijo, con angustia.
Durante algunas horas, referentes de organizaciones sociales esperaron ser recibidos por alguna autoridad local de Litoral Gas. Finalmente, los manifestantes pudieron entregar un petitorio mediante el cual solicitan el congelamiento de las tarifas, en la previa a lo que será la audiencia pública que definirá un nuevo incremento en el cuadro tarifario del servicio de gas natural domiciliario.
La discusión
Para hoy están previstas las primeras audiencias públicas para establecer las tarifas de gas desde el 1° de octubre. El Gobierno está convencido que la recomposición estará por debajo del 30%. Sin embargo, las propuestas que las distribuidoras le presentaron al Enargas solicitud de subas superiores al 80 por ciento. Se cree que el Enargas, ente regulador, no aprobará esas subas. Todo indica que se va hacia una tarifa «política», donde los productores de gas no cobrarán de los distribuidores el precio que están esperando.
El precio del gas está en dólares, y las distribuidoras tienen que pagarlo en pesos equivalentes a la cotización del tipo de cambio. Eso cuesta ahora el doble que a fines de 2017, cuando se estableció el cuadro tarifario anterior, vigente este invierno. Además, como el dólar del período abril-septiembre se movió en un rango muy superior al de fines de 2017 (cuando estaba en $ 20), las distribuidoras quedaron con millonarias deudas con las productoras.(El Norte)