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13/05/2004 |
Gerardo Marchisio Con 18 años enfrentaste al enemigo en las frías aguas del océano. Lejos de casa, lejos de tus padres, amigos y conocidos. El mar recibió el cuerpo de un colonense. Te sacrificaste junto a todos tus camaradas y llenaste de orgullo nuestros corazones. |
Muchos años después de tu hombría, un pequeño grupo de personas que no representan la voluntad de toda una ciudad no empañara tu sacrificio. Todo el equipo de rugby de la ciudad de Colón del cual fuiste participante, te recordará por siempre, porque sabemos que los mismos huevos que ponías en el campo de juego los pusiste en ese barco. No estabas jugando un partido, estabas luchando por nuestra soberanía, y como colonense la peleaste hasta el final. Gracias por tu valor y honra. Que bueno que sería que tu nombre este impreso en una de las obras públicas más importantes de la ciudad. Tendrán conocimiento este reducido numero de necios lo importante que es tener un héroe, caído en combate, para las generaciones futuras. Incluso voy a llegar al extremo de compararte con Cristo. Diste tu vida por gente que hoy niega de tu sacrificio. Mi más sentido respeto al único héroe colonense. La Mascota del Equipo
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