Los delincuentes y los cuentos del tío

El viernes de madrugada vecinos de calle 43 y 18 señalaron que hubo un gran movimiento policial. Los hechos que tuvieron en vilo a un barrio.

Según trascendió por dichos de habitantes del populoso barrio una persona que se encontraba en su lugar de trabajo y se domicilia en calle 18 entre 43 y 44, habría llamado a su mujer luego de recibir una comunicación de la misma que se escuchaban pasos extraños en el patio de la vivienda.

Según se pudo saber, siendo las tres de la mañana la mujer se despertó súbitamente y escuchó como comenzaba a derramar agua la canilla que se encuentra en el patio. Alarmada llamó al marido que rápidamente se comunicó con el 101. La policía en pocos segundos estuvo en el lugar y revisó el lugar. El relato de los vecinos indica que los policías habrían visto algo sospechoso debido a que los patrulleros dieron vueltas varias veces, retrocedieron marcha atrás, revisaron posibles escondites e incluso se habrían escuchado tres o cuatro disparos al aire.

La hipótesis es que podríamos estar ante un nuevo cuento del tío. En este sentido, los ladrones podrían haber abierto la canilla del patio, para que la propietaria del lugar se levantara saliera de la casa y cerrara la pérdida. (recordar que hubo días sin agua y que la gente podría haber dejado la canilla abierta). Es muy probable que si la mujer salía al patio los ladrones lograran ingresar a la casa y luego de reducirla llevarse objetos de valor y dinero.

Scruches

Por otro lado, los últimos robos en casas colonenses ocurrieron
cuando lo moradores no se encontraban en el lugar.
Los delincuentes dedicados a este «trabajo» contarían con muy buena información o utilizarían procedimientos para determinar si la casa esta sin habitantes (tocar timbre, llamar por teléfono etc).
Es recomendable que al ausentarse de las viviendas por algunas horas se deje una radio funcionando, luces encendidas y avisar a un vecino de confianza que de escuchar ruidos o ver movimientos extraños avise a la policía.