Meningitis en Zárate

En Zárate hablan de 60 casos. Se vacuna a toda la población infantil. Se considera epidemia cuando existen 10 casos en 100 mil habitantes.

El viernes y sábado pasado varios centenares de personas en Zárate salieron a manifestar para requerir vacunas contra la meningitis. El propio ministro de Salud, Gines González García llegó a esa ciudad el domingo y aseguró la vacunación para los menores entre la franja de entre 2 a 14 años.

El brote de meningitis que se registra en Zárate es preocupante. Las versiones dicen que existen más de 60 casos. En cambio el informe oficial indica que solo hubo 3 niños enfermos de meningitis meningocosica siendo uno de ellos fatal.

En una primera etapa se vacunó a 15 mil niños de 2 a 9 años y se espera ahora otras 8 mil vacunas para la franja de 10 a 14 años. Se debe recordar que ante un brote de meningitis de estas características se debe vacunar a toda la población de entre 2 y 19 años. Además se considera brote epidémico cuando existen 10 casos por cada 100 mil habitantes.

Por otro lado, se sabe estadísticamente que generalmente en primavera aumentan los casos de esta enfermedad infecciosa.

A diferencia de las virales, las meningitis bacterianas constituyen patologías graves que se caracterizan por la inflamación de las meninges o membranas que recubren el cerebro y la médula espinal. Las formas bacterianas pueden derivar en lesiones neurológicas irreversibles e, incluso, en casos fatales. Para evitar una de las formas más graves -la que produce el germen haemophilus influenzae tipo b-, el ministerio de Salud bonaerense recuerda que resulta fundamental la aplicación de la vacuna cuádruple y sus refuerzos a los 2, 4, 6 y 18 meses de vida, incluidos dentro del Calendario Nacional de Vacunación.
En los recién nacidos, para prevenir la meningitis tuberculosa, es necesaria la administración de la vacuna BCG, obligatoria y, por lo tanto, gratuita en los centros de vacunación.

Medidas de higiene

Las dos formas más frecuentes de meningitis bacterianas -originadas por hemophilus influenzae y el meningococo- afectan, sobre todo, a los niños menores de 5 años y, ambas, se transmiten por las gotas de saliva que se expelen al toser y estornudar o por contacto con las secreciones nasales de las personas infectadas.

Por lo tanto, las medidas de higiene que previenen la propagación de esta enfermedad consisten en taparse la boca y la nariz con un pañuelo al toser o estornudar, lavarse las manos con frecuencia, evitar que los niños intercambien elementos que puedan llevarse a la boca como chupetes, chupetines, mamaderas, juguetes, tazas o cucharas. Además, se recomienda ventilar las habitaciones, en especial las aulas y controlar el estado alimentario y de salud de los niños.

Prevención

En cuanto a la prevención en la escuela, un lugar frecuente de transmisión, se recomienda limpiar las instalaciones en forma diaria y poner énfasis en la desinfección de los pisos con lavandina diluida al 10 por ciento (esto equivale a 1 litro de lavandina más 9 de agua). Además, es necesario limpiar y desinfectar los baños con lavandina diluida al 20 por ciento (2 litros de lavandina en 8 de agua).

Cabe recordar que los principales síntomas de esta enfermedad en los niños son el dolor de cabeza, fiebre alta, vómitos, diarrea, petequias (manchitas rojas en la piel) y rechazo a la luz (fotofobia); mientras que en los lactantes se manifiesta por falta de apetito, llanto y decaimiento.

Por último, desde la cartera de Salud provincial se recomienda que “ante cualquier duda, en este sentido, se consulte de inmediato al médico o al centro de salud más cercano”.