El alcohol es una plaga

Casi la mitad de los varones menores de edad de la provincia de Buenos Aires abusan del alcohol, problema que alcanza al 10 por ciento de las jóvenes.

Los datos surgen de un estudio que realizó la Subsecretaría de Control de las Adicciones bonaerense.
El mismo trabajo revela también que el 77 por ciento de los chicos y el 50 por ciento de las mujeres menores consumen regularmente este tipo de bebidas. Respecto del consumo de drogas se estableció que sólo el cinco por ciento de la totalidad de jóvenes consumen, fundamentalmente marihuana.

La Provincia realizó, bajo supervisión de la Organización Mundial de la Salud, el estudio más completo sobre abuso de drogas legales e ilegales que se ha hecho hasta ahora. Para recabar los datos -que sirven para testear la política anti adicciones implemen-tada por el Ejecutivo durante el año pasado-, se tomó una muestra de 4 mil hogares distribuidos por todo el territorio bonaerense.

Durante la presentación oficial se difundió el primer capítulo de los resultados de ese estudio, que tiene los datos más generales.

El titular de la Subsecretaría de Control de las Adicciones, Sergio Mate, adelantó que «lo más significativo» es que el 45 por ciento de los varones menores y el 10 por ciento de las mujeres deben ser incluidos entre los «abusadores del alcohol».

Eso significa que esos chicos llegan a beber más de 100 centímetros cúbicos de alcohol puro en una sola noche, al menos una vez por mes.

Pero eso no es todo, ya que el mismo estudio comprobó que el 77 por ciento de los varones y el 50 por ciento de las chicas menores de edad consumen regularmente ese tipo de bebidas.

Además, también se constató que la cerveza sigue siendo el principal problema en este sentido, aunque Mate precisó que en líneas generales «comienzan a detectarse nuevas pautas de consumo, con aumento de la ingesta de vino de tetra brik en algunos sectores sociales, y de fernet en otros».

Por otra parte, aunque no hay estudios previos completos que permitan comparar datos con rigurosidad para establecer tendencias, el funcionario estimó por informaciones parciales que «está descendiendo el consumo total de cerveza por parte de los jóvenes bonaerenses», que en el nivel nacional se ubica «en el séptimo lugar entre el resto de las provincias del país».

Drogas ilegales

Acerca de las drogas ilegales, el relevamiento que se presenta hoy indica que sólo el cinco por ciento de los bonaerenses de cualquier edad es consumidor actual de marihuana o cocaína, aunque el consumo de las primeras de esas sustancias es bastante más frecuente que la segunda.

El alcohol en la mira

Para Mate, estos números -a los que calificó de «sustantivamente altos en los referente al consumo de alcohol»-, confirman que el combate a ese tipo de bebidas será el eje de las políticas que su organismo implementará durante lo que queda de ese año y en 2004.

Así, Mate adelantó que están negociando un acuerdo con la Cámara de Super-mercadistas para que en esos locales la venta de alcohol se realice con sistemas especiales de vigilancia, que incluirán cajas aparte y sistemas de video para detectar venta a menores y controlar la cantidad de botellas que se lleva cada cliente.

El subsecretario adelantó también que a fines de octubre se estarán enviando a los municipios los materiales para operativizar los registros en que deben inscribirse los comerciantes que quieran beber alcohol, ya que las sanciones para los que no cumplan entrarán en vigencia hacia enero del año que viene.

Por otra parte, el Ministro de Salud de la Nación, Ginés González García, participará de reuniones con las comisiones de salud de las dos cámaras del Congreso de la Nación, para explicar los alcances del proyecto de ley presentado el 31 de julio pasado por los diputados Eduardo Camaño y Silvia Martínez en representación de la administración de Felipe Solá. Bastante más dura que las otras iniciativas similares que existen en el cuerpo, el proyecto bonaerense propone transformar la venta de alcohol a menores en un delito, además de prohibir totalmente la publicidad de este tipo de bebidas dentro del horario de protección al menor.