Mentiras verdaderas......

La obra de la colectora cloacal costó 100 mil pesos. La pregunta es ¿Funciona o no funciona?. Una pregunta que deberían contestar los funcionarios municipales.

El plan “hermoseando la ciudad” ¿Es una irresponsabilidad?

El intendente municipal Miguel Lavatelli inauguró hace pocas semanas la colectora cloacal de calle 9 y que según explicaron iba a solucionar los problemas al populoso barrio Mirador del Lago. La pregunta fundamental es ¿Funciona la obra?.

En este sentido invitamos a los vecinos del lugar y a quien quiera concurrir y verificar la veracidad de nuestros dichos a constatar la gravedad de la problemática. Según nuestra investigación realizada hace una semana y a pedido de los vecinos del barrio hemos podido constatar lo siguiente.

Los hechos cronológicamente se desarrollaban de la siguiente forma. Antes de la inauguración de la colectora cloacal las aguas servidas se volcaban al no tener la suficiente capacidad en un sector cercano a la calle 53 y 7. En el mismo sentido los baños de las 300 casas y departamentos se veían afectados.

Un cronista de Colón Doce pudo comprobar que personal (sería municipal) realizó una excavación donde se colocaron caños de unos 50 metros y desembocan en una especie de boca de tormenta frente al Jardín de Infantes. El trayecto del caño sigue por calle 53, hasta Ruta 8 y donde las aguas servidas son volcadas a cielo abierto. El olor frente al establecimiento escolar es insoportable a igual que en proximidades de Ruta 8 y calle 53.

La gravedad de la situación tiene varias aristas.

1- La salud de docentes y alumnos del mencionado Jardín.

2- El porque no funciona como debiera la colectora cloacal luego de gastarse 100.000 pesos en la construcción de esta obra pública.

3- Es un error de cálculo con los niveles que tiene hasta la planta depuradora y el agua servida no corre como debiera.

4- Los funcionarios deberían explicar esta grave situación.

Los niños son los privilegiados

El lunes a media mañana un hecho grave ocurrió frente al Hospital Municipal, y que habla una vez más de la liviandad que son tratados a nivel municipal los temas sobre minoridad.

Los acontecimientos que se desarrollaron son de una gravedad extrema y están íntimamente realcionados con un proyecto comunal –al cual criticamos en su momento porque lo consideramos violatorio de los Derechos del Niño- y donde chicos de 13, 14 y 15 años, pertenecientes a la Casa del Niño Willian Morris, se dedican a hermosear la ciudad pintando varias horas por jornada .

Los adolescentes que participan de estos trabajos para evitar accidentes permanecen siempre –según habían dicho en su momento las autoridades municipales- bajo la estricta vigilancia de un encargado o supervisor.

El lunes los hechos se sucedieron de la siguiente forma. Siendo las 9 de la mañana (aproximadamente) cuatro jóvenes del plan Municipal, se encontraban pintando los límites del estacionamiento del Hospital Municipal, en boulevard 50 y 12. Lo acontecido fue presenciado por numerosos testigos que estaban circunstancialmente en ese lugar.

Un adolescente de los que estaban trabajando (pintando) tomó una piedra y la arrojó contra un chico de no más de 14 años. El objeto contundente impactó en la cabeza del menor causándole una herida y además casi la pérdida de la conciencia.

Acto seguido, los tres chicos que estaban pintando en 50 y 12, se acercaron corriendo y comenzaron a golpear al chico que había recibido el piedrazo en la cabeza. Un comerciante de la cercanía y un empleado municipal que circunstancialmente se encontraba en el lugar, lograron con mucho trabajo, apartar a los agresores de la víctima.

Rápidamente el chico herido fue llevado a la guardia del Hospital Municipal donde se le realizó las curaciones (tiene que constar en libro de guardia). Los agresores se retiraron y siguieron realizando la tarea de pintar en la playa de estacionamiento. Según se pudo constatar unos 10 minutos después (pudo ser más) habría llegado el encargado o supervisor, que se dirigió a la guardia del nosocomio. En tanto, varias personas que habían observado los acontecimientos recriminaban el poco cuidado que se había tenido con los adolescentes.

El hecho es grave, pero se agrava al estar los menores a cargo de la propia Municipalidad de Colón.