Un desastre ecológico de magnitud

Una problemática creciente son los basurales a cielo abierto. En la actualidad en nuestra ciudad existen dos. Uno es semiclandestino y el segundo es oficial.

Los vientos que asolaron la región causaron un desastre ecoló-gico de magnitud en cercanías del basural municipal.

Miles de bolsas de residuos de plástico (material no degradable) “volaron” por la fuerza de las ráfagas de viento y se posaron en los campos vecinos. Se debe considerar que una vez que las bolsas se mezclen con la tierra, el material no se degradará y la productividad de la tierra habría quedado dañada.
El Municipio, como una de las primeras medidas ante el hecho consumado, ordenaría trabajar a Planes Jefes de Hogar y empleados municipales al predio afectado para tratar de mitigar la grave problemática causada.

En el mismo orden, observamos que la situación del basural municipal está desbordada. La basura ya ocupa gran parte de terreno, no siguiéndose una metodología de descarga y acomodamiento de los residuos (zanjas etc).

El peligro de la contaminación de las napas de aguas es una realidad que ya no se puede encubrir.
La situación que vive el predio en cuestión parece de un país bananero y no de una ciudad ordenada como Colón. Al ingreso del basural municipal se encuentra viviendo el cuidador y su familia en condiciones infrahu-manas, y expuesto a las mas variadas enfermedades.

Y por otro lado diariamente llegan al lugar decenas de personas (mayores y menores) para rescatar algún elemento que puede considerarse valioso (cartón, diarios, plástico, metales, madera etc) y que es llevado a las viviendas donde habitan, con el fin de clasificarlos.

La metodología origina en los barrios pequeños basurales con focos de infección potenciales para otros vecinos. La gran cantidad de ratas y otros roedores en ciertos sectores de la ciudad, no estaría ajeno a este fenómeno. La mercadería luego de ser clasificada ingresa a la reventa en determinados centros comerciales dedicados al rubro.

Daño

Uno de los factores que daña la salud de los habitantes de los centros poblaciones es la gran cantidad de basura que se va acumulando en terrenos no aptos. Los basurales a cielo abierto (así es como se les llama a estos lugares) suelen ser uno de los focos infecciosos de muchas de las enfermedades que contraen a diario las personas que habitan en sus inmediaciones. Las estadísticas indican que el 19% de las enfermedades provienen de causas ligadas al medio ambiente. En la mayoría de los casos, los afectados se contagian a través del contacto con animales domésticos o roedores infectados, o a través de la ingestión de alimentos en mal estado. Entre las enfermedades que aún persisten entre nosotros figuran el dengue y el cólera.

Semioficial

En cercanías de la planta depu-radora de aguas se encuentra un segundo basural. El lugar inexplicablemente fue utilizado por la Municipalidad para ubicar las hojas y llegar a obtener el compost que sirve de abono.

El compost, jamás se obtuvo, pero los vecinos comenzaron a “tirar” todo tipo de basura y en el presente es un segundo basural a cielo abierto que tiene la comuna por la impericia de sus funcionarios.

Las motos

La tercer parte que tiene la problemática es el ejército de menores y algunos mayores que durante la noche recorren la ciudad abriendo las bolsas y sacando los elementos que consideran valiosos. Un cronista de Colón Doce investigó la metodología usada por estos depredadores de la basura.

En una moto o bicicleta avanza por una calle el que elige la basura. El hombre va abriendo las bolsas de residuos bajándola de los cestos y aquellas que tiene algo valioso la deja a la orilla de la vereda. Un segundo grupo que viene detrás levanta la mercadería valiosa y deja “tirada” la parte que no sirve a sus intereses.

La problemática debe ser contenida aunque sea coyuntu-ralmente. En primer lugar registrando a las personas que realizan la tarea, luego pautando la forma de trabajo y en las condiciones que se debe realizar y por último aplicando medidas preventivas de salud (vacunas antitetánica etc).

La solución definitiva está en manos del intendente y los funcionarios que hasta altura de las circunstancias deberían saber como solucionar la grave problemática que sufra la ciudad con la basura orgánica e inorgánica que diariamente produce.