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17/07/2003 |
Carta de lectores «Inconducta Notoria» Días atrás fue suspendido de sus tareas un empleado de la Municipalidad de Colón por la presunción de “inconducta notoria”. |
Días atrás fue suspendido de sus tareas un empleado de la Municipalidad de Colón por la presunción de “inconducta notoria”. El problema era que dicho trabajador, que cumple tareas para el organismo municipal, le “gritó” (fuera del horario de trabajo) a un inspector de tránsito. En una muestra de incompetencia y abuso de poder un organismo oficial sancionó a un empleado público por protestar ante una falta de tránsito inexistente. Todo parecería indicar que estamos frente a un operativo que apunta a que todo aquello que sea disfuncional en el sistema no tenga voz, que a través de mecanismos de coacción se busque eliminar los puntos de vista que no coincidan con el “ahora” oficialismo. Intentaron, a través de un llamado de atención, “poner la casa en orden”. Su propósito era “hacer callar” uno de los canales que la población tiene para poder conocer la realidad que lo circunda. Pero subestimaron el concepto de libertad, de justicia, de compromiso social que ciertas personas no abandonan como estandarte a pesar del paso de los años. Como muestra del operativo mencionado anteriormente, el martes por la noche en el Concejo Deliberante se dio por terminada la sesión en medio de un debate ideológico. No hubo armas pero si violencia simbólica (y no precisamente por los gritos), materializada en el hecho de prepotencia de no permitir exponer las ideas en el marco de una sociedad democrática. La acusación que sostienen los “títeres” del poder se fundamenta en la forma inapropiada de comunicación de un concejal con el resto de sus colegas, por ejercer, según ellos, violencia simbólica a través de expresarse “a los gritos” Creo que no se dan cuenta que la sociedad pide a “gritos” un cambio: basta de dirigencia incompetente y corrupta, que trata de perpetuarse en el poder sin importarle el precio que algunos deben pagar. Basta de autoritarismo, prepotencia y persecución ideológica. Incoducta notoria, ¡Qué paradoja!: ¿Cómo se llama la conducta de los funcionarios que vaciaron y diezmaron el patrimonio de la sociedad? ¿Cómo se llama la conducta de políticos siniestros que ocuparon cargos mientras se desarrollaban los diez años de “fiesta menemista”? ¿Cómo se llama la indiferencia y la falta de compromiso de los funcionarios que no impidieron que el capitalismo neoliberal se impusiera y con este modelo se incrementara el desempleo, la desnutrición infantil, la pobreza y la marginalidad? ¿Están libres de pecado? Si quisieran hacer cumplir de forma estricta el régimen disciplinario municipal y hacer cumplir las “leyes” ¿no están olvidándose y decretando de forma imparcial “indultos” para ciertos funcionarios? ¿Por qué si hay que mantener una “conducta notoria” hay ciertos dirigentes de guantes blancos y fines negros que roban sin decoro alguno? ¿por qué hay ciertos políticos que usan el patrimonio público en beneficio propio? Si después de las 15 horas, horario en que termina la jornada laboral en el municipio, hay que mantener una conducta moral y ética que rija la vida de quienes cumplen funciones en dicho organismo ¿Por qué no todos mantienen un comportamiento intachable? como debería ser. El que esté libre de pecado que se anime a tirar la primera piedra |