Madrugadores. Los vecinos se sorprendieron con la aparición de una cuadrilla de Edelap a las siete de la mañana
Apenas amanecía sobre la ciudad cuando una cuadrilla de la empresa Edelap llegó a la esquina de 17 y 504 en Gonnet con la misión de trabajar sobre el transformador ubicado allí. No es un aparato cualquiera: está siendo investigado por la Justicia porque contiene PCB, y existen serios indicios de que su funcionamiento y mantenimiento no es el ideal.
Todo indica que los operarios pretendían pasar inadvertidos para evitar la reacción de los vecinos, pero el movimiento de vehículos fue escuchado nítidamente en esas horas silenciosas y la reacción de la gente evitó que sucediera. En la noche previa un llamado anónimo a la redacción de Hoy alertó que eso podía suceder, y posibilitó que nuestro reportero gráfico captara la escena que ilustra esta nota.
Esa esquina está enclavada en una zona donde se registra una escalofriante estadística de casos de cáncer y enfermedades que podrían tener vinculación con el contacto con esa sustancia: en la cuadra hay quince familias y existen por lo menos ocho personas con tumores.
Los operarios llegaron con la supuesta misión de subsanar los problemas de mantenimiento del artefacto, limpiar puertas oxidadas y mejorar su aspecto, pero no lo lograron. Los habitantes salieron a la calle para impedirlo. Lo que siguió fue un entredicho entre vecinos y operarios, y la sospecha de que la orden era cambiar el artefacto quedó instalada.
Los trabajadores esgrimieron órdenes emanadas del Ente Regulador de la Energía (ENRE) y los vecinos respondieron con un reclamo incumplido por las autoridades, el cual está incluido en una denuncia penal presentada por la Comuna local: aún no se tomaron las muestras del aceite refrigerante del transformador para comprobar su grado de contaminación.
Por ello, a criterio de los vecinos y de las autoridades de medio ambiente, no sería correcto que se realicen trabajos o se manipule el único elemento de prueba hasta que las muestras sean tomadas. Para los habitantes de la zona no deja de ser sospechoso que la empresa haya intentado actuar en un horario extraño y sin notificarlos previamente.
Ana Porreca de Pelayo vive justo frente al transformador y fue una de las primeras que escuchó los movimientos. Salió inmediatamente a la puerta de calle, y con otros vecinos impidió que los operarios trabajaran. “Nosotros les dijimos que no permitiríamos que toquen el transformador hasta que no se tomen las muestras”.
El mismo argumento fue esgrimido un par de horas más tarde, cuando otra comitiva de Edelap se presentó en el lugar. En esa oportunidad el intento del ingeniero Massera de trabajar en el transformador también fracasó. Sólo logró una instancia de diálogo para la semana que viene, en la que intentarán consensuar una fecha para tomar las muestras.
“Queremos que se tome la muestra en presencia nuestra y que se nos entregue una contramuestra para hacer nuestros propios estudios. Es algo que no se ha hecho y se ha pedido por varias vías”, dijeron lo vecinos.
Obviamente, la resistencia de ayer no implica que los vecinos se opon-gan a que el transformador sea erradicado. Todo lo contrario, quieren que se cambie de artefacto y que su refrigeración sea “inocua”.
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Una cuadrilla de la empresa intentó trabajar sobre el aparato de 17 y 504. Los vecinos salieron a la calle para impedirlo. Piden que antes se tomen las muestras de aceite. Se trata de un artefacto investigado por la Justicia, por lo cual no debería ser tocado hasta concluir las actuaciones