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13/03/2003 |
Un futuro productivo incierto Adonde va el campo colonense El productor agropecuario colonense va hacia el monocultivo. La relación ganadería-agricultura en el más bajo nivel. ¿El manejo inadecuado repercutirá en la futura productividad? |
La ganadería ya no es la “reserva monetaria” de los productores agropecuarios. El descenso en los último 20 años fue espectacular. En la década de los setenta la cantidad de vacunos superaba las 56 mil cabezas. En sentido contrario, en nuestro partido la siembra de soja en la campaña 2002/03 alcanza a las 60 mil hectáreas . (49 mil con soja de primera y 11 mil con soja de segunda). El maíz abarca 18 mil hectáreas y el trigo 6 mil hectáreas. La superficie del partido de Colón llega a las 101 mil hectáreas. La situación es la siguiente: el 83 por ciento esta dedicado a la agricultura y el 17 por ciento a la ganadería. Los manuales de un manejo de la tierra aconsejable, marcan a “fuego” que el 60 por ciento de la superficie debería estar dedicado a la agricultura y el 40 por ciento a la ganadería. Según los técnicos, el agricultor de Colón (pasa lo mismo en Pergamino, Rojas, sur de Santa Fe) por motivos económicos va “peligrosamente” a un monocultivo: la soja. El viejo dicho de nuestros abuelos cuando señalaban que se debía diversificar la producción “poniendo los huevos en varias canastas” es solo una frase hueca. El manejo intensivo puede repercutir en la futura “productividad” de la tierra. En el medio y como una cuña existe un tema “candente” y “polémico” la siembra directa que trataremos en próximas ediciones.. También es notable la distribución que existe en el stock ganadero. Una importante establecimiento agropecuario (los accionistas serían propietarios de una conocida cadena de supermercado) son propietarios de 3000 cabezas. Una Sociedad Anónima con nombre de árbol tendría otros 3000 vacunos pastando en sus campos. Un tradicional establecimiento rural llegaría a un stock de 1100 vacunos y los propietarios de tres estancias alcanzarían en forma conjunta 6000 vacunos. El 35 por ciento del stock ganadero sería “engordado” por solo 6 establecimientos agrope-cuarios. El restante 65 por ciento lo tendría el resto de los establecimientos agropecuarios. El fenómeno preocupante es que el 95 por ciento de los establecimientos que tienen menos de 150 hectáreas no crían vacunos, ni porcinos, teniendo sus propietarios el mayor perfil de monocultivo. La involución En el presente existen aproximadamente 37 mil vacunos. Las averiguaciones realizadas por Colón Doce nos demuestran la involución que tuvo la ganadería local. En el Censo Agrope-cuario de 1914, las planillas confeccionadas revelaron que nuestro partido tenía 44151 vacunos, 17181 lanares y 7175 porcinos. En el Censo Agropecuario de 1936, el resultado reveló que había 64.428 vacunos, 33605 porcinos y 4465 lanares. La demostración es que existen dirigentes políticos que viven en un mundo irreal, que se debieran haber preparado para gobernar antes de ser dirigentes. Debido al anuncio en un medio radial sobre un futuro proyecto para San Sebastián. Según el plan, los productores de la región abastecerían con 3000 cabezas porcinas mensuales la futura cadena de producción de la planta que fabrica embutido en la Ruta 8. La faena se realizaría en un matadero de porcinos que se construiría en nuestra ciudad. El partido de Colón no alcanzaría a disponer de 1500 cabezas de porcinos. La mayoría de ellos en poder de un grupo norteamericano que se dedica a la crianza y engorde de lo mismos. El stock de porcinos de toda la región serviría – trabajando a plena producción- para abastecer dos meses a la planta local de San Sebastián. El segundo punto es el tan “mentado” matadero de porcinos. En las provincias de Santa Fe y Buenos Aires existen más de 15 mataderos de cerdos que debieron cerrar. El mayor problema que encontraron estas plantas es la falta de stock. El propio mercado de Liniers tenía el sector porcino que cerró hace varios años. |