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05/03/2003 |
Dudas y certezas de uno (o de varios) “Harto ya de estar harto |
Y yo al igual que el catalán también estoy bastante cansado de no obtener respuestas a preguntas tales como: ¿por qué si hay funcionarios que fueron elegidos para un cargo no funcionan?; ¿acaso no son idóneos?; ¿tendrán algún interés creado? Uno sospecha las respuestas, pero como estas escasean y cuando las hay no son claras, uno sigue dudando e interrogándose: ¿por qué las empresas que deben cumplir reglamentaciones no las cumplen?; ¿quizá no las conocen?, ¿no se dieron cuenta?, ¿se les escapó?. Entre tanta duda y respuesta sospechada, aparece alguna mínima certeza que aporta claridad. Entonces uno, aunque sea para sacarse la bronca grita a los cuatro vientos: “Señores: ¡No están haciendo las cosas bien!, ¡No están cumpliendo las reglamentaciones!, ¡Nos están enfermando con su granza!, ¡Hace años que en esta época no se puede vivir cerca del ferrocarril ni con las vías respiratorias sanas!!! Obviamente, ahora algunos saldrán muy serviciales a querer responderme. A ellos les digo que a esta altura del partido uno no quiere mas palabras. Por lo tanto la única respuesta que daré como válida es la solución: que la granza deje de caer en mi patio y deje de irritarle las mucosas a mis hijos y sus mascotas. Habiendo descargado estas pocas certezas de ciudadano común que conoce alguno de sus derechos, a uno lo vuelven a asaltar las dudas, muchas dudas. Pero hay una que me preocupa especialmente y que quiero compartir con ustedes: los encargados de cuidar el “medio ambiente” ¿pensarán que medio proviene de “mitad”? Carlos Contreras
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