Subidos a la torre de Babel

El decreto del gobernador Felipe Sola llamando a internas simultaneas para el próximo 30 de marzo, reactivo un volcán apagado. Las reuniones se suceden pero cada fracción política maneja su propio idioma.

La zanahoria electoral seduce a todos, aunque muy pocos serán los elegidos. La ciudadanía observa expectante como los políticos se “montan” al carrusel partidario en busca de la sortija que le de un pasaje a un “efímero” poder terrenal.

Las próximas elecciones municipales tendrán premios y castigos y así lo demuestran las encuestas encargadas por partidos locales, sondeos provinciales y propias de Colón Doce.

El tema que más llama la atención dentro y fuera de nuestra ciudad, es el descrédito que existe en los referentes políticos locales. En este sentido, los resultados son contundentes, sobre todo cuando el encuestador pregunta: ¿A quien no votaría nunca? Y se le da un menú de políticos, funcionarios actuales y ex funcionarios para elegir . Casi un 70 por ciento de los políticos que están en actividad nunca serían votados por sus convecinos. De esta catástrofe se salvan muy pocos, sobrando los dedos de una mano para contarlos.

El panorama

En los cuarteles de Carlos Mazzieri existe silencio de radio. El “jefe” como lo denominan en el círculo íntimo, esta decidido a “subirse” nuevamente a la pelea política. Aunque el propio empresario no quiere hablar y señala “ cuando haya algo seguro lo voy a dar a conocer”. Las fuentes que maneja Colón Doce dicen que las reuniones en la quinta y en la oficinas de calle 14 entre 49 y 50 se suceden.

Un allegado argumentó: “ existen dos posibilidades la formación de una Junta Vecinal o que vaya por dentro del justicialismo”.

Por dentro del peronismo, Carlos Mazzieri seria acompañado por Ramón Ayala, Martiris Niz y Felipe Gilich. La segunda alternativa de la Junta Vecinal deja muchas dudas.

La pregunta es la del millón. Un peronista como Ramón Ayala con un profundo concepto verticalista ¿Acompañaría a Mazzieri por fuera del justicialismo?.

El segundo tema no es menor. Si el empresario textil va a elecciones para intendente, seguramente tendrá que enfrentar “chicanas” jurídicas, impugnando su candidatura desde dentro y fuera del propio justicialismo.

En los pasillos municipales se maneja la hipótesis de la candidatura de Miguel Lavatelli. El médico espera en silencio, observando que pasa en los cuarteles de Mazzieri. El y sus allegados saben que su suerte esta “atada” a la decisión del empresario.

El sequeirismo y el zapallismo abrían abierto canales de dialogo y hubo una importante reunión en la sede partidaria de calle 51. Algunos dirigentes – con pretensiones a candida-tearse- ven su suerte electoral atada a lo que el empresario textil pueda decir o hacer. La sombra de Mazzieri esta en todas partes y en todas las conversaciones y posibles negociaciones Es un fantasma que se corporiza a cada momento.

Estos funcionarios y ex funcionarios justicialistas sueñan que el “hombre de la bolsa” no se presente y termine no habiendo internas. Para ellos la salida sería Miguel Lavatelli como candidato a intendente, Ramón Ayala presidente del partido y acordar una lista de concejales consensuada. La otra pata es la gente de Adolfo Rodríguez Saa. El Adolfo nombró a Roque Spagnuolo como un referente para conformar una lista que de pelea en el orden comunal.

El avance de la hormiga

La personalidad de Gerardo Soria y su trabajo trascendió las fronteras de nuestra ciudad. En poco tiempo el líder de la Junta Vecinal recibió “ofertas” para ser referente de Rodríguez Saa, Néstor Kirchner y Elisa Carrió. Los llamados y los encuentros no fueron con emisarios “segundones” si no del propio riñón de los centros de poder.

Soria se negó a cada llamado, aunque dijo que apoyaría a todo al que tome en sus manos una verdadera causa popular.

Su candidatura esta instalada en la población y todas las encuestas lo dan como uno de los “ candidatos mimados” por los votantes. (el otro es el propio Mazzieri).

El no niega su decisión de ser el “candidato”, pero quiere que su partido tenga la última palabra, aunque se sabe que habrá una lista única y una “bendición” a su persona.

En la sede partidaria solo existe optimismo. Todos saben que la posibilidad de ser gobierno esta muy cerca y al alcance de la mano.

El radicalismo

El radicalismo está golpeado. La salida abrupta de Fernando De La Rua dejó heridas que también repercuten en nuestra ciudad y que tardarán en cicatrizar. Esta semana el centenario partido inició una ronda de consultas y debates. En el presente existen pocos candidatos con llegada. Uno de ellos es Carlos Reybet, pero el concejal niega que exista posibilidad de ser candidato al máximo sillón de 51 y 18. En tanto los más nostálgicos sueñan con el retorno de Rubén Díaz o la candidatura de Miguel García. Ambas posibilidades están abiertas aunque la primera es más improbable que la segunda.

La Alianza

El único lugar donde funcionaba la Alianza luego del alejamiento de los radicales del gobierno nacional era en nuestra ciudad. El bloque estaba formado por Carlos Reybet y Ricardo Raineri. El concejal del Frente Grande ahora emigró a las huestes del pergaminense Manuel Torres Molina y apoya al santa-cruceño Néstor Kichner a igual que el justicialismo de nuestra ciudad (Sequeiro, Lavatelli, Ayala). La posibilidad de una alianza de Raineri con el “ofi-cialismo” colonense es factible y probable.

Por último, en el ajedrez político quedan los socialistas y la gente del Frente Grande. La probabilidad que Walter Bilos sea candidato es cierta a igual que la del socialista Néstor Iacci. La grilla de largada comienza a estar completa, la meta puede ser antes de septiembre cuando se elija el nuevo intendente de Colón. Por ahora la mayoría de los posibles candidatos están “subidos” a la torre de Babel donde están hablando distintos idiomas que el hombre común todavía no puede sintonizar.