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| 31/10/2002 |
| Signos de reactivación en Colón Problemática económica |
En los últimos meses en la ciudad de Colón se observan evidentes signos de reactivación económica. Una particularidad de este “verano económico” es que aparece en un marco de una enorme contracción en el rubro alimenticio. Los supermercados, almacenes, panaderías, carnicerías venden un 30 por ciento menos. En este sentido, ayudó a no empeorar la situación aún más que las cuentas municipales estuvieran en orden y se pagará en término. También que las grandes empresas (Bolsarpil, Cestari, Mazzieri) capearon el temporal sin una profunda recesión. Sin embargo, en Colón en algunos rubros se observa una incipiente reactivación. El campo con afán de los precios de cereales y animales vacunos motorizó la compra de vehículos ( sobre todo camionetas) y maquinaria agrícola, además de la adquisición de bienes inmuebles. En el sector metalúrgico se observa una incipiente actividad sobre todo en aquel relacionado con maquinarias agrícola y construcción. La industria de la construcción también comenzó un ascenso. Se venden más materiales (arena, cemento), las carpinterías están recibiendo más trabajos y los constructores y albañiles realizan más obras. Los consultados indican que por ahora es una tendencia. Según declaran él fenómeno está motorizado por la buena situación del campo que por desconfianza en los bancos “derrama” el dinero a estos rubros. Sin embargo y en forma paulatina los Bancos (oficiales y privados) comienzan a recibir nuevamente la confianza de depositantes. Los consultados dicen que la “nueva confianza” es una consecuencia de las altas tasas de interés que se pagan. La estabilidad se nota y disminuyó la compra de dólares en Bancos o en las denominadas “cuevas”. La gente en este momento vende más de lo que compra. Aunque no se ve el esplendor y no existe “gran recuperación” de puestos de trabajos la luz del final del túnel comienza a observarse. ¡Ojalá que siga así!. |
Los mejores resultados se observan en el sector de la industria metalúrgica, lo siguen la industria de la construcción. El fenómeno sería arrastrado por las buenas condiciones económicas del sector agropecuario.