Por cuarenta años la creyeron muerta

La dramática historia comenzó en Santa Ro-sa, en la provincia de La Pampa, donde Noemí Arnuz Llanos nació y contrajo una enfermedad psiquiátrica en su adolescencia, por lo que la internaron en el hospital platense de Melchor Romero. En 1978, en plena dictadura militar, la llevaron a un nuevo hospital, en Per-gamino, sin avisarle nada a su familia.

Su mamá Paula la buscó hasta morir en Romero, donde le dijeron que su hija, a la que apodaban Mimí, se había escapado del hospital y que había muerto ahogada. Sin embargo, a través de una nota periodística que se viralizó por Internet, algunos de sus familiares, en La Pampa, la reconocieron y ahora van por su reencuentro.
El antes y el después que marcó la historia de la paciente neuropsiquiátrica se produjo en 1978, cuando Pergamino, que aspiraba a ser cabecera de la Región Sanitaria IV y obtener así un mayor presupuesto en salud, debía cumplir con un requisito: Disponer de un hospital que tuviera un área de salud mental con 60 internos psiquiátricos.
Como en la zona no había ese número de pacientes psiquiátricos internados, se decidió trasladarlos desde el hospital Melchor Romero de La Plata.
Los 60 internos, enviados en colectivos, fueron alojados en la entonces flamante área psiquiátrica del Hospital Interzonal de Agudos San José, de Pergamino.
Un periódico de Pergamino hizo recientemente una nota en ese sector del hospital y reflejó, entre otras, la historia de Mimí, que permanece internada hace 38 años sin nadie que la visite. La nota publicada por el portal Primera Plana no tardó en viralizarse, y para sorpresa de todos, familiares de la mujer en La Pampa la reconocieron.
"Quiero decirle a Mimí que su mamá no la abandonó, que la buscó siempre que pudo, pero le decían que se había escapado y que se había ahogado en el río", dijo una de sus primas, que dijo haber crecido escuchando la triste historia.
Según informaron desde el Hospital, su familia viajará en los próximos días para conocer a Mimí y poner fin a cuatro décadas de angustia