En números también goleó al resto. Dos fechas antes clasificó al partido decisivo ya que en su zona no tuvo inconvenientes. Solamente dos veces besó la lona: en su visita a Racing y en la última fecha contra Huracán donde su cabeza estaba puesta en el Ciclón. Justamente la Academia fue el único que lo superó en el ítem goles a favor (28). Además fue el que menos tantos recibió man-teniendo la valla invicta en 11 juegos sobre 17 posibles si contamos la final. Tuvo al goleador del torneo José Sand con 13 gritos y resultó el más ganador de cotejos (13).
Todo esto tiene un hacedor y es Jorge Almirón. El DT se reinventó después de su mal paso por Independiente. En Argentina por estos meses se habla mucho de la herencia recibida. Si lo trasladamos al fútbol él tomó lo que dejó Guillermo Barros Schelotto. No significa que haya salido campeón por el mellizo debido a que este equipo tiene su impronta y jugadores que se revalorizaron y aparecieron tales los casos de José Luis Gómez y Miguel Almirón. El primero tiene características de lateral brasilero. Por momentos parece un wing y sus proyecciones lastimaron a los rivales.
Mientras que el segundo por esas cosas del fútbol tuvo su oportunidad y no la desaprovechó. Allá por la sexta fecha con Newell's le tocó estar desde el arranque porque Aguirre estaba suspendido por ver la roja una jornada atrás. El volante con su velocidad, buen manejo del balón y vértigo se ganó el puesto. El "Di María para-guayo" por todo lo hecho está en la Copa América re-presentando al seleccionado dirigido por Ramón Díaz. Pero no fue el único determinante en el mediocampo. Marcone y Román Díaz formaron una dupla que se caracterizó por tener quite, marca, recuperación, coberturas y hacer jugar a los de arriba. El tridente ofensivo no desentonó. Los dos extremos Mouche y Acosta complicaron a todas las defensas con sus desbordes. Una de las virtudes de ambos fue la falta de egoísmo sabiendo que Sand tenía que ser en la mayoría de los caso el finalizador de las jugadas.
Pero para revalidar todo lo hecho el Granate tenía que enfrentar a San Lorenzo. Y vaya si lo hizo. En el Monumental brindó una lección de fútbol. Sometió cuando y como quiso al cuadro de Guede apabullándolo y borrándolo. Solo hubo un con-junto en la cancha llevando al rival a ser un espectador de lujo.
Lanús escribió otra página en su historia con un detalle no menor. Los únicos dos títulos locales conseguidos fueron nada más y nada menos que en la Bombonera (2007) y el Monumental.
No será un campeón más. Si tomamos la última década quedará en la memoria al igual que Newell's del Tata Martino, Vélez de Gareca o el River de Gallardo en el plano internacional. Alguno podrá decir el Huracán de Cappa pero aquel equipo se quedó con las manos vacías.
Lanús ahora tendrá una chan-ce de sumar otra estrella cuando juegue con Racing por la Copa Bicentenario que también otorgará un pase a la Sudamericana. Pero para eso falta. El presente marca que es un justo campeón. Salud
*Periodista. Director Técnico Nacional de Fútbol
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