Los inconvenientes florecen en su rancho como duraznero en primavera. Sus amigos cercanos y lejanos, por asociación de hechos, ya le dicen "Mauricio". No es para menos ni para multiplicar. El rancho se llenó de barro, pero siempre con una filosofía oriental masticada y asumida a un problema se lo debe disfrazar con una solución y aprovechando la crisis sembró papas hasta debajo de la mesa y en la bañadera (hacia como tres meses que no se usaba por el precio de la electricidad para el calefón eléctrico) realizó una plantación de ajo para tener dentro de seis meses cuando llegue el verano, baje la inflación, suban los salarios, bajen los precios y haya trabajo para todos y todas y se pueda comer asados, bien bañado con un chimichurri hecho en casa. En estos tiempos todo es recicable señaló, el gaucho "Traviata" (por los 17 agujeros que tiene la camisa para ir a bailar) y cuando se le inundó el patio sembró arroz y a su mujer para que no se queje de las goteras en el techo de paja, consiguió un sombrero mexicano. Somos lo más parecido al gobierno nacional gritó el gaucho "Flor de loto", siempre le encontramos la vuelta para salir bien parados y acto seguido al perro le pinto un zapallito amargo de color rojo, para que creyera que era carne.
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