Pero nuestro Pirincho, envuelto en la bandera de "Resistiendo con Aguante" no se rinde. En esta nueva epopeya del gaucho héroe de mil mateadas e ingresos a asados sin invitación previa, pero con una guitarra en la mano y cantando la marcha de la Bronca llamó a sus amigos el gaucho "Huevito Quinder" (Tiene más grande el huevo que el juguetito) y el gaucho "Vinchuca (Duerme de día y chupa de noche) y juntos formaron un sociedad de Hecho y Derecho, para construir tablas de lavar de madera (las que tenía la abuela), y ahora con el aumento de la luz (mala),las amas de casa no van a poder usar el lavarropas automático, ese aparato que dejaban las «agraciadas» y se iban a hacer ejercicio al gimnasio con música rítmica. Esa época se acabó, ahora a torcer la espalda y agrietarse las manos con el jabón más barato. La alternativa es o comemos al mediodía o lavamos la ropa. Así que el negocio para nuestros tres gauchos será como vender maní en un zoo. (que no nos hagan una marcha los de Cerremos el Zoo por estos dichos). La primera partida de 300 tablas de lavar vendrán con un pequeño folleto para indicar a las jóvenes madres de menos de cincuenta años como se usa y cuales son las contraindicaciones. Una de ellas es que se debe utilizar agua y jabón e ir cargándola de a poco, por prenda de vestir (continuara).
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