Estas son solo algunas de las tantas preguntas que se escucharon en la semana luego de que Carlos Tevez fracturara de tibia y peroné a Ham. La jugada desafortunada recorrió el mundo. La polémica se instaló. La pelota quedó a un costado. La opinión dividida. Solo sabe el victimario si fue malintencionado.
Lamentablemente en el fútbol argentino es común ver la plancha del Apache.
Increíblemente el árbitro Luis Alvarez ni siquiera sancionó infracción. En consecuencia no fue expulsado ni castigado de oficio. Así lo confirmó Fernando Mitjans, presidente del Tribunal de Disciplina de AFA. Argentina no es Inglaterra. Tampoco España u otras ligas. Allá los futbolistas si no ven la tarjeta roja y tienen una acción violenta o desleal son suspendidos. Esta semana sucedió con Diego Costa, centrodelantero de Chelsea que provocó la expulsión de un hombre de Arsenal. Estará afuera tres partidos.
Volviendo al fútbol doméstico, da la sensación que vale todo. Entre propios colegas parece que se aca-baron los códigos. Los hechos vistos están lejos de las declaraciones que habitualmente realizan los jugadores levantando la bandera del fair play. Carlos Bueno estuvo seis meses afuera por sufrir también una fractura pero de parte del arquero Agustín Orión. El delantero de San Martín de San Juan fue contundente días atrás diciendo: "todo está brusco. Se está yendo la mano con el tema de agredirnos entre nosotros. Muchas peleas e insultos. Se perdieron los códigos". Final feliz tuvieron dos entradas terribles que no tuvieron consecuencias.
Una de Leonardo Pisculichi a Nicolás Aguirre en el empate de River frente a Lanús. Otra la de nuestro coterráneo Guillermo Farré sobre Adrián Bastía.
El médico de Argentinos, José Artese disparó: "No trabaron pie con pie. Fue un choque de planta de pie con la tibia". Pipo Gorosito fue por más: "alguien que estuvo adentro de una cancha sabe que fue a pegarle a propósito, claramente. Los que jugamos a la pelota lo sabemos". Diego Maradona salió a responderle al DT: "en vez de hablar de Tevez debería trabajar más para que Argentinos Juniors vea el arco contrario". De paso el diez bancó al Apache: "no es mala leche". También lo respaldó Gerardo Martino a pesar de que el técnico de la selección señalara "que si uno ve la imagen congelada hay que darle 30 años de cárcel".
Es cierto que el tema se instaló más mediáticamente por la importancia del protagonista. Tan cierto como que a la hora de los análisis no tendría que haber camisetas que valga. Poco sirve que el jugador no tenga antecedentes de mal producto lácteo. Con una acción de esta gravedad puede juzgárselo.
La sociedad se muestra dividida con el tema. Cada uno cree tener la razón. Solo el inconsciente de Tevez tiene la verdad.
*Periodista. Director Técnico Nacional de Fútbol
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