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Boca, volvió a ser y River cerca de la gloria por Gonzalo Calvigioni Una semana atrás en esta columna manifestábamos que si los torneos continuaran con 19 fechas, seis hubiesen sido los equipos con chances de ser campeones. Con los resultados del fin de semana que quedó atrás, Boca estaría a un paso de sumar una nueva estrella mientras que San Lorenzo y River serían los únicos con chances de arrebatarle el cetro. Por su parte Rosario Central, Racing y Belgrano no tendrían posibilidades en la última jornada. Pero nada de eso sucede porque en Argentina es el único lugar del mundo donde 30 conjuntos compiten por ser campeón.
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A esta altura el puntaje de los tres de arriba es superior a los conseguidos por los últimos ganadores de torneos cortos, tales los casos de Newell's conducido por Gerardo Mar-tino o San Lorenzo de Alma-gro dirigido por Edgardo Bauza. Boca suma 40 puntos. Sin dudas que el receso por la Copa América le vino bien a Arruabarrena para que sus dirigidos dejarán atrás de cierta forma el trauma causado por la eliminación a manos de River en la Libertadores. Ya no están algunos nombres como Burdisso, Torsiglieri, Osvaldo, entre otros pero retornó un ídolo: Carlos Tevez. El xeneize se trajo de Córdoba tres puntos que valen oro por las circunstancias de juego y el rival que tenía enfrente. Bel-grano es duro y combativo. Viene realizando una sor-prendente campaña. Boca sacó diferencia en el marcador por el tanto de Gago y aguantó los avances del local con 9 hombres por las expulsiones de Pablo Perez y Peruzzi promediando la segunda mitad. Pero el "pirata" equivocó los caminos. Lo reconoció el colonense Guillermo Farré: "abusamos de los envíos de centros en lugar de buscar los espacios. Eso facilitó la tarea de los defensores de ellos". También hay que detenerse en lo hecho por Tevez. En su segundo compromiso vistiendo la camiseta que ama se puso el equipo al hombro. Se es crack en Europa o en cualquier parte del planeta. El Apache es consciente de que deberá adaptarse rápidamente al torneo doméstico que es más friccionado que la premier o el calcio. Acá es difícil encontrar espacios libres y los que hay el que resuelve debe hacerlo rápido de lo contrario se somete a un foul o la quita del balón. Tevez asumió el liderazgo. Aguantó, luchó, corrió y recibió mas de una docena de faltas. Bienvenido al fútbol criollo. Boca no jugó bien pero se quedó con un partido que a la larga puede pesar para ser campeón. El domingo recibirá a Unión. Tendrá que tomar recaudos y no confiarse ya que de los equipos "invitados" el Tatengue es el que mejores resultados cosechó. Gamba y Malcorra pueden traerle un dolor de cabeza a los defensores de la Ribera. Uno de los escoltas es San Lorenzo. No sumo de a tres pero tampoco besó la lona en una visita riesgosa a Godoy Cruz. Al igual que el líder perdió a dos hombres por ver la tarjeta roja (Caruzzo y Barrientos). Los jugadores del Ciclón mostraron no realizaron una autocrítica de juego sino que post partido y en la semana apuntaron y dispararon con el arbitraje de Silvio Trucco. Para ellos nuevamente fueron perjudicados por los fallos. Igualmente los de Bauza siguen en la conversación y darán batalla hasta el final, poniéndose también el traje de candidato. Otros de los perseguidores de Boca es nada mas y nada menos que River. Con vida en dos frentes y disputando entresemana la primera final de la Libertadores en México frente a Tigres. En la fecha 18 dio vuelta el resultado con Colón. Con habituales suplentes y ráfagas de fútbol le alcanzó. Cavenaghi otra vez autografió la red por quinta vez en los últimos dos juegos y Tabaré Viudez le sigue devolviendo la confianza a Gallardo que apostó por él cuando el uruguayo era des-conocido por nuestras tierras. Precisamente el DT cumplió un año al frente del equipo millonario. Sin dudas 365 días de más aciertos y conquistas que tragos amargos. Gallardo volvió hacer a River protagonista a nivel internacional. Alzó la Copa Sudamericana y está en la final de la Libertadores. Eliminó dos veces a Boca, eterno rival, en ambas competiciones. El trago amargo para el muñeco fue perder la Superfinal con Hura-cán, ver a Racing campeón por haberle dado prioridad a la Sudamericana y quedar afue-ra de la Copa Argentina con Rosario Central por duplicado. Pero desde los números todo le cierra: 67 partidos jugados con 36 triunfos, 24 igualdades y apenas 7 caídas. Convirtió 106 goles y recibió solamente 49. Vaya paradoja. El goleador del ciclo es Teo Gutierrez a quien Gallardo no hizo oposición para que deje el club por propia voluntad y elija seguir su carrera en Portugal. El ojo clínico de Gallardo confió en Alario y en Viudez. Los dos le permitieron estar en la final con aquella jugada asociada en Paraguay frente a Guaraní. *Periodista. Director Téc-nico Nacional de Fútbol
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