Lo pudo ser. Atrás quedó el sueño de Argentina de ser campeón del mundo que estuvo a punto de hacerse realidad si no fuera por las situaciones de gol desperdiciadas. El saldo del mundial es positivo. El equipo fue de menor a mayor mutando nombres, tácticas y estrategias. Sabella llegó a Brasil con la idea de sacarle rédito a los "cuatro fantásticos": Messi, Di María, Agüero, Higuaín. Pese a ello el DT sorprendió en el debut contra Bosnia al apostar por línea de 5 a la hora de defender. No resultó. Por eso ante Irán y Nigeria volvió al 4-3-3 utilizado en eliminatorias. Si bien ambos cotejos fueron ganados Argentina no tuvo volumen de juego y los rivales generaron varias situaciones de gol. Sabella corrigió y resolvió lo que parecía imposible como lo era el funcionamiento defensivo. Para lograrlo puso en cancha 4-4-2 siendo Lavezzi el delantero que se convirtió en volante. Fundamental la entrada de De- michelis.
Además la estrategia fue achicar para atrás para que se vea un equipo compacto en líneas. Mascherano fue el abanderado para el orden. Quite, recuperación, garra, voz de mando y corazón fueron las características que mostró el volante central. El capitán sin cinta. Mientras que Sergio Romero fue casi invencible. Mantuvo la valla invicta contra Suiza ('120), Bélgica, Holanda ('120) y durante '113 frente a Alemania.Argentina planteó bien la final. La táctica y estrategia fueron inteligentes. Ocupó los espacios y maniató a un rival que le había convertido 7 goles al anfitrión Brasil que sufrió una goleada histórica. En un partido cerrado, Hi- guaín, Messi y Palacio desperdiciaron tres situaciones claras. Los delanteros enfrentaron a Neuer perdiendo el duelo por remates desviados. Inexplicable la del jugador del Napoli. Sorprendente que no haya sido gol la de Lío. Inentendible la del hombre del Inter.
El reproche para el entrenador son los cambios que realizó. Afuera Lavezzi en el entretiempo. Adentro Agüero. No resultó. El "Pocho" había hecho un buen primer tiempo. Seguramente Sabella quiso que el "Kun" sea la compañía de Lionel Messi. Pero Agüero tuvo el alta médica después de su lesión en primera fase pero no el alta futbolístico. Además los ingresos de Gago y Palacio no aportaron nada. Alemania fue un justo campeón. Proyecto a largo plazo que le devolvió la gloria 24 años después. El destino quiso que sea que nuevamente Argentina la víctima. Equipo con variables y que prioriza el buen trato del balónEn el 2018 la cita mundialista será en Rusia. Argentina cumplirá 32 años sin alzar la Copa. Mucho tiempo. Por eso quedará el sabor amargo de que la acariciamos pero se nos alejó nuevamente porque Gotze puso fin al sueño…
Lionel Messi, de mayor a menor
Era su tercer mundial. Llegó golpeado en lo anímico después del mal semestre de Barcelona. Desde lo físico despertaba dudas. Pero el propio jugador antes de viajar a Brasil dejó en claro que había "cambiado el chip". Hasta dejó escrito la promesa de traer la copa en un fixture de un ciudadano que lo abordó en un bar de Rosario en busca de un autógrafo. Estaba confiado. Pero no rindió lo esperado. De mayor a menor. Por sus goles en primera fase Argentina clasificó a los octavos de final. Contra Bosnia, Irán y Nigeria tuvo jugadas y no juego pese a que Sabella puso en cancha el sistema 4-3-3 donde más cómodo se sentía. Su asistencia a Di María en el epílogo del alargue ante Suiza posibilitó llegar a cuartos. Pero desde ahí no apareció. Aceptable contra Bélgica. Nada contra Holanda.
El mundo del fútbol y un país esperaba que Alemania sea su partido. El más importante de su carrera. Pero no lo fue. Solo algunos destellos y un remate cruzado desviado. Poco, muy poco. Nadie duda de las condiciones ni de su técnica. Se le exige a quien puede dar más. Messi no tuvo ese plus que se le pide a los grandes jugadores. Las comparaciones son siempre odiosas. Queda en claro que no hay que tratar de buscarlas con Diego Maradona. Maradona fue único. Messi hay que compararlo con otros jugadores que vistieron la albiceleste o con el propio Messi. Dejó pasar una oportunidad única. Por lo que venía haciendo, por edad justa y por sentirse cómodo en Sudamérica. No está mal hacer una crítica. Es deber del periodista analizar. Por eso Messi se va de Brasil con muchas preguntas y pocas respuestas.
*Periodista. Director Técnico Nacional de Fútbol.
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